Tras el recuento del 40 por ciento de los votos, Kadima aventaja al Likud por un margen de un punto porcentual después de que los sondeos a pie de urna situaran esa diferencia en dos escaños.
Livni resaltó que «debemos respetar la elección de los votantes» y formar un gobierno alrededor de Kadima con el centro-derecha, alusión al Likud, y el centro-izquierda, en alusión al Laborismo.
En una alocución ante simpatizantes en la sede de su partido, la líder de Kadima se mostró convencida de que «nosotros seremos los que lideraremos el próximo gobierno de Israel«, afirmación que, por su parte, también realizó esta noche Netanyahu.
Según la tradición, el jefe del Estado de Israel, un cargo que en la actualidad ocupa el presidente Simón Peres, militante de Kadima, encarga la formación del gobierno al líder del partido más votado en las elecciones generales.