Tegucigalpa – La reciente crisis en el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras, desatada por la renuncia condicionada de la consejera Ana Paola Hall, representante del Partido Liberal, ha puesto en evidencia no solo las tensiones internas en el proceso electoral, sino también un giro notable en el discurso del Partido Libertad y Refundación (Libre).
-Mientras tanto, el Congreso Nacional permanece inactivo, sin sesiones programadas para abordar la renuncia de Hall, lo que agrava la incertidumbre.
Lo que inicialmente fue señalado por Libre como una maniobra del «bipartidismo» para desestabilizar el CNE, ahora se presenta como una consecuencia de las presiones y divisiones internas dentro del propio Partido Liberal.
Este cambio de narrativa ha generado cuestionamientos sobre los motivos detrás de esta aparente contradicción y su impacto en el proceso rumbo a las elecciones generales del 30 de noviembre de 2025.
La consejera Hall expuso no estar de acuerdo con reuniones sin quórum en el CNE y colocó su cargo a disposición, acción que se concretó con la presentación formal de su renuncia “condicionada” el pasado viernes 25 de julio ante la secretaría del Congreso Nacional.
Narrativa
La narrativa inicial de Libre sugería que la postura de Hall estaba alineada con el Partido Nacional y hablaba del bipartidismo, pero al señalar después que las sesiones del CNE requerían la presencia de los tres consejeros para ser legales, logró que el oficialismo comenzará a apoyarla.
Esta posición fue respaldada por el asesor presidencial y coordinador de Libre Manuel Zelaya, quien públicamente felicitó a Hall por su postura, lo que generó críticas dentro del Partido Liberal.
Ahora Rixi Moncada, candidata presidencial de Libre, señaló que la presentación de la renuncia de Hall como consejera del CNE ante el Congreso Nacional es la confirmación de que la representante del Partido Liberal ante el órgano electoral fue obligada a realizar esa acción.
“La han obligado a que renuncie porque hizo público su posicionamiento en cuanto a que convocar un pleno de dos era totalmente ilegal y eso les causó escozor porque no les gusta la legalidad”, apuntó.
No obstante, la candidata oficialista fue más allá al rechazar la nominación de Jhosy Toscano como posible sustituto de Hall, afirmando que su partido no apoyaría a un candidato que representara «un fraude más, ordenado por la cúpula del bipartidismo, como en 2013 y 2017».
De su parte, el secretario privado de la Presidenta Xiomara Castro, Héctor Manuel Zelaya, indicó en su cuenta de X que la dimisión de Hall, aunque sin precedentes, no es sorpresiva, y responsabilizó directamente al liderazgo de Salvador Nasralla por lo ocurrido.
“Es el resultado directo del liderazgo errático, misógino y profundamente irresponsable de Salvador Nasralla”, afirmó en su publicación.
De su lado, el periódico oficialista Poder Popular recoge en su portada de este día la posición del candidato a designado presidencial, Enrique Reina, quien expresó que “Ana Paola Hall no renunció por Libre ni por Marlon Ochoa, sino por presiones del Partido Liberal”.
Expectativa
Ante el anterior escenario, la politóloga María Luisa García concluyó que “el CNE ha sido una institución que históricamente ha sido zona de conflicto debido a que la razón de ser de ese órgano sigue en manos de los partidos políticos.
A menos de cuatro meses de las elecciones generales, la crisis en el CNE y el cambio de discurso de Libre reflejan las profundas divisiones políticas en Honduras.
Lo que comenzó como una acusación de «bipartidismo» contra Ana Paola Hall se ha transformado en un señalamiento directo al Partido Liberal, evidenciando las tensiones no solo entre partidos, sino también al interior de las propias instituciones políticas. PD