Tegucigalpa – Entre debates y confrontaciones por determinar las figuras que encabezarán o no la Fiscalía hondureña, este jueves la violencia volvió a estremecer al país, con más de una decena de asesinatos en varias ciudades, el mismo día que dos legisladores demócratas exhortaron al gobierno estadounidense de Barack Obama, a aumentar la atención sobre la crisis de seguridad ciudadana y respeto a los derechos humanos que padece este país centroamericano.
– Tres hallazgos de cadáveres en sacos o bolsas plásticas, balaceras con muertos y heridos, asaltos, sicariato y otros crímenes, ocuparon la agenda informativa.
Desde tempranas horas del día, los medios informaban de levantamientos de cadáveres en zonas residenciales de la ciudad capital, una práctica cada vez más cotidiana.
En la colonia Humuya, donde se han levantado varios cadáveres en los últimos días, se encontró a un joven de 15 años sin vida envuelto en sábanas. La víctima cursaba el ciclo común y había desaparecido desde el pasado miércoles.
Sin pasar mucho tiempo, sólo unas horas después otro cuerpo era encontrado en un solar baldío de la colonia Soto de Comayagüela, en tanto por la tarde en la zona del Country, otro cadáver era abandonado cubierto en bolsas plásticas.
La epidemia de violencia se desplazó a la colonia Nueva Danlí, donde un joven fue asesinado tras visitar a su madre. El ahora occiso presentaba varios impactos de bala en la cabeza y tenía el pantalón debajo de la rodilla. Su madre no podía entender por qué lo habían matado.
Otro hombre fue asesinado en el sector de la colonia Centroamérica Oeste mientras se cortaba el pelo en una barbería de la zona. Se conoció que dos hombres a bordo de motocicletas llegaron al negocio y tras una balacera lo asesinaron de forma inmediata.
El interior del país también se tiñó de sangre
Pero el jueves de violencia también tuvo cobertura en otras ciudades del país: Puerto Cortés, Santa Bárbara, Choluteca y Comayagua registraron homicidios, al menos otras cinco personas murieron en condiciones trágicas, de acuerdo a los reportes de corresponsales, porque la información oficial sobre el registro de asesinatos sigue sin reportarse.
Un hecho violento se produjo en El Higuito, municipio de Trinidad, en Santa Bárbara, donde dos hermanos fueron acribillados en su propia vivienda.
Los hermanos Fredy y Geovanny Madrid fueron asesinados en el interior de su vivienda, las causas no fueron establecidas por la Policía.
Mientras, en Puerto Cortés, un hombre de nombre José Santos Rivera Hernández (35) fue asaltado y posteriormente asesinado por dos malhechores.
En Choluteca, José Luis Linares (27), de oficio taxista, fue acribillado por sicarios al momento que éste conducía la unidad 567.
En la escena del crimen se encontraron múltiples casquillos de arma de fuego y el motorista de la unidad de taxi murió cuando recibía atención médica en un hospital de la zona.
Pero Comayagua no se escapó de los índices violentos. En la atolera Joselyn fue asesinado un hombre a manos de dos sicarios que escaparon en motocicleta.
El ahora occiso tomaba atol en el referido negocio en el preciso momento que sus victimarios lo atacaron a disparos. La víctima fue identificada como José Luis Montoya Melgar, originario de La Ceiba y su cuerpo quedó sobre una mesa del negocio
Legisladores de EEUU
Mientras Honduras se desangra en constantes hechos de violencia que cobran la vida de 20 personas diarias, en Estados Unidos, este mismo día, dos legisladores demócratas exhortaron al gobierno de Barack Obama a aumentar la atención sobre la crisis de seguridad ciudadana y respeto a los derechos humanos que padece este país centroamericano.
El representante demócrata por Massachusetts, James McGovern, señaló que la seguridad y el respeto a los derechos humanos no ha mejorado, «sino más bien se han deteriorado» e identificó como su principal preocupación que «Estados Unidos pueda estar apoyando a esos violadores (de derechos humanos) a través de nuestra cooperación internacional, que incluye 16 millones de dólares para la Policía hondureña en lo que va de este año».
Por su parte, el senador Tim Kaine, demócrata por Virginia, quien durante su juventud trabajó con jesuitas en Honduras en 1980,
agradeció en la audiencia al Departamento de Estado y a la embajada estadounidense en Tegucigalpa por responder a sus inquietudes sobre la situación, «pero ciertamente se puede y se necesita hacer más».
agradeció en la audiencia al Departamento de Estado y a la embajada estadounidense en Tegucigalpa por responder a sus inquietudes sobre la situación, «pero ciertamente se puede y se necesita hacer más».
Kaineseñaló que las acciones oficialesde «no encausado a los responsables por atacar a víctimas sólo por su profesión o activismo» y exhortó a los 79 legisladores de la Comisión de Derechos Humanos a «presionar al gobierno (estadounidense) para que contacte al gobierno hondureño» sobre el nombramiento del fiscal general, lo que calificó «crítico para garantizar la rendición de cuentas sobre infracciones a los derechos humanos patrocinadas por el Estado».
«El gobierno de Lobo ha adoptado varias medidas, a veces bajo presión estadounidense, para mejorar (la protección a) los derechos humanos», dijo Kaine.
«Pero muchas de esas reformas se han estancado», acotó.
Fiscalía
Tirza Flores Lanza, ex magistrada de un tribunal de apelaciones en San Pedro Sula, propuso que Washington reanude su cooperación a Honduras sólo después de concretarse la depuración de la Policía Nacional y el Ministerio Público, y que se nombren integrantes «independientes e idóneos» del Consejo de la Judicatura.
La ex jueza Flores Lanza está vinculada con los círculos del primer anillo del partido Libertad y Refundación (Libre) que dirige el ex presidente Manuel Zelaya.
Flores Lanza recomendó también que se condicione la ayuda a la elección de un fiscal general y su adjunto en marzo del 2014, nombrados por el Congreso electo en los comicios previstos para noviembre.
Flores Lanza acusó al presidente del Congreso, Juan Hernández, candidato presidencial, de nombrar al fiscal general antes de los comicios de noviembre.
Sobre el tema de la Fiscalía, el presidente de la Comisión de Seguridad del Congreso hondureño, Mario Prez, dijo que hay fiscales ligados al crimen organizado y consumidores de drogas y como hay ausencia de las cabezas del Ministerio Público es obligación del Congreso llenar ese vacío.Pérez dijo que aportes de la propia Comisión Interventora del Ministerio Público indican la colusión de funcionarios del MP con el crimen organizado y el consumo de drogas por parte de algunos de ellos, quienes lo han confesado, según expresó, incluso antes de someterse a las pruebas de confianza.
Lo que ha arrojado la intervención al Ministerio Público y nos han revelado “da escalofrió” reafirmó el parlamentario.
“Todo mundo lleva la discusión al plano político”, dijo el diputado Pérez, calificando el concepto atribuido al ex fiscal Roy Medina en torno a la necesidad de esperar la conformación del Congreso Nacional entrante para elegir a las nuevas autoridades fiscales hondureñas.
Sobre el golpe de timón en facciones de la sociedad civil que han acompañado el proceso de auditoría y cambios en el MP, incluso en el descabezamiento del fiscal general y su adjunto, Luis Rubí y Roy Urtecho, respetivamente, el parlamentario dijo que “mientras Sociedad Civil tenía una posición clara hace unos meses, mientras nos acompañó en la evaluación de operadores de justicia y por escrito nos pidieron que nosotros hiciéramos las acciones encaminadas a que se dieran las destituciones, ahora terminaron politizándose y parece que ahora están conformes y dicen que no se necesitan cambios en la ley”, expresó en declaraciones a periodistas.
Manifestó que “este cambio de posición parece que tiene más que ver con ese juego político con que el próximo Congreso van a haber nuevas bancadas y que van a pujar fuertemente para que en estos cargos queden militantes de esos partidos políticos” arguyó.
A su juicio “hay ausencia definitiva y el Ministerio Público necesita llenar esas ausencias de autoridades”.
