Desde comienzos del año 2020 los contenidos de Youtube dirigidos al público infantil han sido regulados por una estricta política, la cual se temía que pudiera afectar la creación de nuevos contenidos, sin embargo, la evidencia parece mostrar que estas reglas no han desestimulado su creación.
¿Cómo logró adaptarse la industria de contenidos infantiles a la nueva regulación?
La Comisión Federal de Comercio (Federal Trade Commission, “FTC”) en 2019, sancionó a YouTube por recabar información sensible y personal de millones de menores de edad sin el debido consentimiento de los padres (o Tutores) sin una notificación o advertencia previa, lo cual a su vez generó que google ganará miles de millones de dólares en publicidad dirigida y segmentada a menores[1].
Un artículo publicado por el portal de noticias económicas EXPANSIÓN[2], asegura que Youtube se habría aprovechado de la popularidad que tiene entre el público infantil.
Al respecto el presidente de la FTC, Joseph Simons, en un comunicado de prensa, aseguró en su momento que:
“YouTube promocionaba su popularidad entre los niños entre sus potenciales clientes corporativos”, “Pero la compañía se negaba a reconocer que partes de su plataforma estaban claramente dirigidas a los niños”. “Lo cierto es que muchos canales muy populares en YouTube ofrecen dibujos animados y canciones de cuna o infantiles, destinadas a espectadores menores de 13 años. No hay excusa para las violaciones de la ley de YouTube”, concluye la FTC. Joseph Simons presidente de la FTC
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, quien actuó como parte acusadora en el proceso, mediante un comunicado aseguró que:
“Google y YouTube, ilegalmente y a sabiendas, monitorizaron, trazaron y sirvieron anuncios personalizados a niños pequeños solo para continuar recibiendo millones de dólares de la publicidad”. “Estas compañías han puesto en peligro a los niños y han abusado de su poder”, Letitia James fiscal general de Nueva York[3]
Google tuvo que ajustar su política
Para cumplir la normatividad vigente y dar cumplimiento a los acuerdos con la FTC y evitar futuras sanciones, a partir del mes de enero de 2020 Google comenzó a exigir a todos sus creadores identificar el contenido que están subiendo a la plataforma, aclarando si está dirigido al público infantil, para que el mismo cumpla con la estricta política de control fijada por la compañía, que a su vez dejó de recabar información de los menores, evitando la inserción de Cookies en los archivos temporales del usuario y programando la instrucción en sus algoritmos para no hacer seguimiento a ninguna usuario que consuma contenidos infantiles o dirigidos a menores[4].
La política no solo se aplicó para los Estados Unidos, sino a nivel global, pues le resultaba muy difícil a Youtube diferenciar la regla de distribución en una sola región, por lo que todos los creadores, que de una u otra forma suban un contenido dirigido a menores de 14 años en cualquier lugar del mundo, deben ajustarse a la directriz. Incluso en la actualidad Youtube busca expandir esta regulación no solo a niños sino también a adolescentes[5].
Un impacto positivo
La política de Google ha servido para garantizar que Youtube sea una plataforma mucho más segura para los niños, lo cual sumado a un sistema eficiente de control parental, ha permitido que muchos padres de todo el planeta estén más tranquilos de que sus hijos consuman contenidos adecuadas para su edad[6].
No obstante, lo anterior, como lo anticipados en un artículo publicado en 2019, existió un el temor notable por parte de la industria, de que la política pudiera afectar la creación de nuevos contenidos[7].
Youtube es una plataforma que se sostiene a través de la publicidad y el éxito de su modelo radica en el perfilamiento y caracterización individual que hace de sus usuarios, permitiendo que de esta forma el anunciante pueda dirigir el mensaje publicitario eficientemente y con el menor desperdicio posible, a su vez Google traslada la mayor parte de las ganancias de la publicidad al creador del contenido y ellos se quedan con una porción resultante del proceso de intermediación.
Bajo este esquema, durante la década pasada, aparecieron miles de horas de nuevas producciones originales en todo el planeta, la mayoría de ellas producidas por animadores y creadores de contenidos independientes, que gracias al pago de publicidad se ven motivados a subir nuevos contenidos, al tiempo que grandes productoras han decidido compartir parte de sus producciones en esta plataforma.
Con la nueva directiva implementada por Google, los creadores de contenidos infantiles se creó una importante restricción a los anuncios segmentados y dirigidos al público infantil, algo que podría afectar la creación de estos contenidos, sin embargo lo que muestra la evidencia es que finalmente los creadores se adaptaron a las nuevas condiciones y aunque al principio hubo una disminución de sus ingresos, con el tiempo se regularizó la creación y monetización sin afectarlos de forma tan directa.
Al respecto Vince Commisso, CEO y presidente de 9 Story Media Group, comentó que:
“En términos de consumo televisivo, no sé si hay un mejor momento que éste. Nosotros contribuimos no solo con los canales de televisión sino que también somos proveedores de las plataformas de streaming, y con todo el consumo que está sucediendo, esta es la mejor oportunidad para estar comercializando nuestros contenidos. En términos de expansión de licencias y desarrollo de productos, estamos teniendo un plan más cauto, pero tampoco lo entiendo como algo malo, sino que siempre hay presiones para tener los planes de merchandising y licensing pronto, cerca de los estrenos de las producciones.
Por suerte ahora estamos empezando a ver mayores audiencias en nuestros contenidos, por lo que servirá de empuje para tener el plan de licensing listo y en marcha para suplir la demanda”. Vince Commisso en Contenidos NEWS[10]
La mirada de 9 Story Media Grupo la comparte también Jon Ollwerther, VPE Marcas Globales y Desarrollo de Negocios de Genius Brands International que afirmó:
“Haber creado un modelo de negocios que puede sobrepasar desafíos económicos como los que está enfrentando la industria en este momento. Nuestros guionistas están escribiendo, los animadores están en sus puestos de trabajo y nuestro equipo de negocios está trabajando en una manera muy organizada[11]”.
En Conclusión, Los cambios introducidos en Youtube, como consecuencia de la nueva normatividad de protección de menores, no solo han logrado proteger los pequeños en su privacidad y frente a la exposición indebida de contenidos, sino que finalmente se evidenció que la regulación en la materia no ha desestimulado su creación, simplemente la industria buscó estrategias de adaptación a las nuevas circunstancias y finalmente con el tiempo la creación de contenidos infantiles sigue estando vigorosa y en franco crecimiento.
