San Salvador – Representantes de los partidos de oposición en El Salvador rechazaron este viernes el anuncio del presidente Nayib Bukele de buscar la reelección inmediata en 2024.
Bukele, que anunció el jueves su intención de mantener la Presidencia al menos hasta 2029, es el primer presidente de la etapa democrática salvadoreña que intentará reelegirse.
Claudia Ortiz, diputada del partido Vamos y una de las principales críticas del Gobierno de Bukele, afirmó que «la Constitución es clara: la reelección presidencial está prohibida».
«Ya sabemos lo que sigue, por experiencia de otros países, cuando un mandatario tuerce el texto constitucional y busca perpetuarse en el poder: más exclusión, más corrupción, más pobreza, más abuso del poder», dijo la legisladora en un video difundido en sus redes sociales.
Llamó a «crear un frente amplio plural como alternativa a esta deriva autoritaria» y advirtió que «un político que violenta la Constitución de su país es capaz de todo».
Dina Argueta, diputada del Frente Farabundo para la Liberación Nacional (FMLN), señaló que la Constitución salvadoreña «no permite la reelección».
Dijo que «hay funcionarios en este país que necesitan de una reelección para tapar todos aquellos casos y posibles señalamientos una vez finalizado su periodo» y «para evitar posibles enjuiciamientos».
La Alianza Republicana Nacionalista (Arena) señaló en un comunicado que el presidente Bukele «se vende como el redentor de El Salvador, pero en realidad ha sumido en un caos a nuestro país.
«Ha pactado con pandillas, la vida es más cara, la corrupción es peor que nunca. Ha destruido nuestra democracia y nuestro Estado de Derecho», sostuvo la formación de derecha.
Agregó: «Hoy se quitó la máscara y develó su verdadera intención, postergarse en el poder».
La posibilidad de que Bukele se reelija por un segundo mandato consecutivo en 2024 se abrió en septiembre pasado, cuando una cuestionada Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia modificó un criterio sobre el tema de 2014.
Antes de dicha resolución, quien ocupaba la Presidencia debía esperar 10 años después de concluir su mandato para buscar ocupar nuevamente el puesto.
