Tegucigalpa – Para el analista Luis León, la clase política hondureña perdió crédito entre la población ya que desde 1982 pasamos de pobres a ser casi miserables, una situación de desesperanza para la mayoría de la población.
– Calificó como “desobedientes” a los funcionarios del gobierno por no hacer caso a la presidenta que les pide sus renuncias por andar en campañas políticas abiertas.
Dijo que la clase política ha perdido el crédito y la confianza porque no han sabido ser respuesta a las necesidades de los hondureños.
Avizoró que las elecciones primarias de marzo próximo y las generales de noviembre de 2025, serán complejas “porque en el 2021 el fuera JOH hizo que la gente fuera masivamente a votar, luego porque hubo una alianza que generó simpatías por el deseo de sacar al Partido Nacional, sin embargo hoy no veo ese entusiasmo ciudadano por participar en un nuevo proceso electoral”.
León cuestionó que las elecciones están en precario y a eso hay que agregar que el control de los entes electorales está en manos del tripartidismo.
“Los partidos políticos en Honduras han perdido su razón de ser que es servir a la población”, acentuó.
El analista mencionó que desde 1982 que Honduras inició una nueva era democrática paso de ser pobre a un país casi miserable, lo que retrata que la clase política no ha sido la solución a los eternos problemas de la nación.
Analizó que “existe mucha incapacidad política de hacer una propuesta real, lo que tenemos es una carrera política-ideológica que no beneficia en esencia al pueblo hondureño”.
Refirió que el 75 % de la población hondureña son menores a 45 años, lo que se suma al dato que 3.5 millones de personas desempleadas, lo que hace pensar que son los jóvenes los que están sin trabajo.
Abogó para que el proceso electoral de 2025 sea confiable para no seguir atentando contra una maltrecha democracia que es sostenida en hilos en este país centroamericano. JS