Tegucigalpa – El director ejecutivo de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (CHICO), Silvio Larios, denunció que la deuda acumulada del gobierno con el sector construcción supera los 2,500 millones de lempiras y sigue en aumento, producto —según él— de una actitud autoritaria, desordenada y negligente por parte de los funcionarios encargados.
“Estamos enfrentando una situación insostenible. Hay una actitud muy negativa, muy mala, de parte de nuestros funcionarios. Actúan con soberbia, como diciendo: ‘Aquí mando yo y pago cuando me dé la gana’. Así lo estamos viendo”, reclamó Larios.
El dirigente gremial expuso que los constructores no están recibiendo anticipos ni pagos a tiempo, y que las estimaciones se pagan de forma tardía. Mientras tanto, el gobierno exige cumplimiento estricto de los contratos, sin cumplir ellos mismos con su parte.
“Exigen tiempos, exigen ejecución, pero no hay fondos. Entonces, ¿cómo quieren que cumplamos si ellos mismos no cumplen? Es una situación injusta y absurda que venimos viviendo gobierno tras gobierno, pero estos de ahora… se lucieron”. “Esas son brutadas, son las tonteras de las que ya estamos hasta la coronilla, estamos hartos de estarlo viviendo gobierno tras gobierno”, expresó.
Silvio Larios también cuestionó la falta de preparación y experiencia de muchos de los funcionarios actuales, a quienes responsabilizó por la falta de rumbo en las políticas públicas.
Hay gente muy capaz, no lo niego, pero en general lo que vemos es improvisación, decisiones inoportunas, un desempeño deficiente. Se nos fueron prácticamente los cuatro años y las cosas no cambiaron. Tuvimos la esperanza de que habría una mejora en el manejo de los pagos, de las viviendas, de las carreteras. Pero todo se vino abajo «, lamentó.
En sus declaraciones, Larios también responsabilizó directamente a la presidenta Xiomara Castro por la falta de liderazgo ante esta crisis. “La presidenta es la jefa del Estado, del gobierno, y no les dice nada. Los deja hacer lo que quieran. Ellos creen que todo está bien, pero solo hay que ver las calles, hablar con la gente. El país está hastiado”, manifestó.
“Mientras unos ganan salarios jugosos, otros sufrimos”. Finalmente, el dirigente del sector construcción advirtió que el ambiente es cada vez más tenso dentro del gremio, ya que los que sí están trabajando enfrentan un nivel de precariedad que se ha vuelto insostenible.
“Los que realmente estamos trabajando estamos sufriendo. Y los que no hacen nada, están ganando sueldos jugosos sin mover un dedo. Es indignante”, adicionó Larios.
La CHICO ha reiterado que, si no se solventa esta situación de manera urgente, muchas obras seguirán paralizadas y cientos de empleos estarán en riesgo. La deuda estatal, la ineficiencia en la gestión y la falta de respuesta oportuna continúan siendo obstáculos para el desarrollo de la infraestructura nacional, puntualizó Larios. LB
