Tegucigalpa – Astrid Guadalupe Madrid Paz, es una guapa y talentosa joven originaria de Santa Bárbara, occidente de Honduras, que sueña con destacar y trascender en el mundo de la música, su aspiración por triunfar no tiene límite, tampoco condiciones, sino esperanza de representar a su amado país con su angelical voz, en un reconocido reality show en Hollywood.
Astrid apenas tiene 15 años, es una niña pero canta como grande. Su pasión por la música inició desde los cinco años, cuyos comienzos datan en las reuniones familiares, posteriormente en la iglesia y varios eventos sociales y culturales. Ahora busca estar en uno de los programas más prestigiosos de Latinoamérica que se producen en Estados Unidos.
Próximamente, Astrid estará en suelo estadounidense para participar en la audición final en el programa Talento, Tengo Mucho Talento, en Hollywood. Ahí conocerá sobre su participación, sin embargo, ella ya realizó una prueba virtual y la aprobó, por lo que no sería una sorpresa que se quede para competir en el programa de cazatalentos. Ella sería la primera hondureña en participar en dicho programa.
La talentosa quinceañera del occidente de Honduras, conversó ampliamente con Proceso Digital, para contar paso a paso, como es que la vida le ha cambiado, justamente después de conocer que podría tener una oportunidad más, para exponer su angelical voz en el reality show estadunidense.
“Fue un momento especial, porque se trata de hacer lo que más me gusta y con lo que yo siempre he soñado”, externó la joven cantante para describir como fue el momento en que su teléfono sonó, en el que una voz extraña le pregunto: si estaban sus padres, a quienes se les informó que ella estaba entre los participantes, preclasificados.
Las Doncellas, un grupo de jóvenes cristianas -de su edad-, que anima en ocasiones, la Santa Eucaristía en la parroquia de Santa Bárbara y una grabación virtual con el reconocido artista argentino, Juan Etchegoyen, con quien interpretó el éxito musical Can´t help falling in love de Elvis Presley, fueron sus presentaciones iniciales en el mundo de la música.
Astrid es sencilla, amable y siempre está sonriente, estudia bachillerato, le encanta la música clásica, ejecuta a la perfección la guitarra, el piano y actualmente está aprendiendo a tocar (ejecutar) la marimba y ukelele, dos instrumentos muy peculiares en la cultura santabarbarense, municipio conocido popularmente como la tierra del junco, el café y las mujeres bellas.
“Yo estoy cada día aprendiendo más, pero me estoy esforzando al máximo, sé que es difícil sobrevivir en Honduras con la música o el arte, por eso he puesto un poco la mirada fuera del país, yo quiero ser una persona que pueda abrir puertas a los demás jóvenes que sueñan con triunfar, porque aquí tenemos talento y no solo en la música”, relató.
Previo a terminar su entrevista con Proceso Digital, cantó a capela una parte de la canción “Solamente una Vez”. Finalizó diciendo que sueña en grande. Se describió como una persona positiva y soñadora que busca representar con dignidad a Honduras, “espero regresar con buenas noticias, he trabajado para ello y tengo la fe que con la ayuda de Dios, puedo lograrlo”, concluyó. JP