Nueva York, Estados Unidos.No solo de pan vive el hombre. También vive de métricas (y estas -muchas veces- vienen acompañadas del morbo).
Lo viral supera a lo real. Lo interesante sobrepasa a lo importante. Lo que se quiere saber desplaza a lo que se debe contar.
Por eso es importante leer y escuchar críticamente para entender la intencionalidad del mensaje.
Y, hablando de intencionalidad, el fin justifica los yerros. Es decir, ¿la defensa del expresidente Juan Orlando Hernández es novata? ¿Esos abogados no han aprendido a formular preguntas? ¿En verdad están desconcentrados y confunden datos y nombres? ¿La redundancia en los contrainterrogatorios se debe a que no tienen nada qué preguntar?
No hay que ser tonto, pero a veces funciona parecerlo. ¿Cuáles son las noticias que más se han viralizado en torno al juicio? Respuesta: lo que el equipo de la Defensa ha sembrado.
Para 18 personas que desconocen lo que ha pasado en Honduras en los últimos años, que no están al tanto sobre cómo se manejan las redes del narcotráfico en Sur, Centro y Norteamérica, que apenas han escuchado sobre las acciones de quienes ahora rinden testimonio, puede parecer sorprendente tener que creer en las declaraciones que asesinos y narcotraficantes confesos. Entonces, más allá de lo que vieron y a quién sobornaron, su atención se concentra en lo que hicieron y de qué hechos participaron antes de estar sentados y empezar a «cantar» bajo juramento.
Y aunque la paciencia del juez Kevin Castel parece estar llegando al límite con el equipo de la Defensa, con llamados de atención al estilo de director de escuela, con las preguntas aparentemente tendenciosas de ¿cuánto tiempo te falta para terminar el contrainterrogatorio? y las objeciones constantes de la Fiscalía, al final del día, los abogados defensores parecen salirse con la suya, bajo la técnica de restarle credibilidad a los testimonios, en primer lugar, porque no son personas dignas de confianza y, en segundo lugar, porque carecen de pruebas que avalen sus historias.
Hasta ahora los contrainterrogatorios parecen ser cansados, desenfocados y reiterativos, pero tienen algo en común:logran establecer un punto y, posiblemente, dejar al jurado con dudas razonables. Además, dan de qué hablar en redes sociales.
Que si las iniciales JOH pueden ser tanto para mujer como para hombre o referirse a una empresa, que si la traducción de «su» al inglés cambia el género y da cabida a interpretaciones, que si Tony Hernández es o no un nombre común en Honduras o que bien puede significar Tommy Hilfiger, que si en una narcolibreta aparece el nombre «Rambo», podrían hacer referencia a Sylvester Stallone, que si un texto mal escrito y con errores ortográficos se debe o no corregir al hacer la traducción al inglés, que si hay o no capacitaciones en «Interpretación de narcolibretas», que si se pueden mostrar recibos, comprobantes, audios, videos u otras grabaciones que evidencien las «donaciones» o «aportaciones» para campañas financiadas con fondos del narcotráfico, y un largo etcétera.
Este juego entre palabras y pruebas será de nunca acabar, porque -hablando en serio- ¿cómo se va a demostrar que efectivamente se realizaron esas transacciones, donaciones o ayudas con fondos provenientes del narcotráfico para favorecer campañas electorales? Esas cosas se hacen, a veces se cuentan, pero nunca se registran o se dejan rastros. ¿O es que están esperando algo así?:
«Estimado señor/a (nombre de quien recibe) por este medio hago constar que yo (nombre del/la narcotraficante que emite el pago) entrego la cantidad de (monto en lempiras o dólares) al señor/a (nombre del/la persona o político que recibe) en concepto de «aportación voluntaria para financiar la campaña electoral del/la candidato/a (nombre del candidato/a a beneficiar)», estableciendo que las partes abajo firmantes estamos en plena conciencia de que estos fondos provienen de ganancias del narcotráfico y que son de suma importancia para seguir operando con tranquilidad.
Esta donación se entrega a cambio de (escribir concepto del porqué de la aportación o donación, ya sea protección, seguridad, acceso a información o todas las anteriores).
Y para los fines legales, jurídicos, demandas, vendettas, extradiciones, juicios o cualquier proceso futuro, se extiende la presente constancia a los (definir día) del mes de (establecer el mes) del año (registrar el año).
Consignan dicho recibo los abajo firmantes (espacio para tres firmas. Cuatro en caso de que haya un aval o veedor):
(Narcotraficante que hace la donación -mecenas-)
(Persona que recibe los fondos -intermediario-)
(Persona a quien le patrocinarán la campaña -destinatario final-).
(Acompañar las firmas con sello, huellas dactilaresy sangre para que el ADN sea verificable).
Nota: imprimir estos recibos en papel membretado, validado por la SAR (Servicio de Administración de Rentas) y autenticado por un notario público.
(Letras pequeñas: en caso de enemistad o traición de alguna de las partes, este documento tiene validez moral, social y legal y puede utilizarse como prueba fiel, natural e irrefutable en procesos judiciales en contra de las personas involucradas).
Es esto o nada (entiéndase la ironía).