Tegucigalpa – Un estudio realizado el Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS), de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), deja en evidencia que la supremacía de los hombres sigue prevaleciendo en la integración de las planillas a cargos de elección popular de los movimientos del Partido Nacional, Partido Liberal y partido Libertad y Refundación (Libre).
-En las elecciones primarias se definirán los tres candidatos a la Presidencia, dos del PN, tres del PL y cuatro de Libre; 128 aspirantes a diputados y los 298 precandidatos a alcaldes.
El IUDPAS publicó la segunda entrega con información sobre la composición de las planillas de los tres partidos políticos que celebran elecciones primarias e internas en marzo 2021: Partido Nacional, Partido Liberal y partido Libertad y Refundación; la información registra el número de aspirantes a diputados por sexo y para alcaldes o alcaldesas de las 18 cabeceras departamentales.
Un largo camino
En principio, los tres partidos cumplen con la disposición legal de la alternancia en la ubicación de las mujeres en la papeleta; sin embargo, una mirada al detalle conduce a conocer o evidenciar las formas, particularidades o detalles que nos ayudan a conocer más sobre la participación de las mujeres en política, y específicamente en cargos de elección popular.
La publicación refiere que la participación de las mujeres en la política, con derecho a ser electas en cargos de elección popular, ha sido un largo camino. Después de la conquista del derecho a elegir en 1955, las primeras elecciones se producen en 1957, muy pronto como para haber escalado más posiciones en el tema de los derechos políticos.
Los golpes de Estado de 1963 y 1971 detienen los procesos electorales, y probablemente postergaron aún más la participación de las mujeres en cargos de elección popular.
En la Asamblea Nacional Constituyente que se elige en 1980, a dos mujeres: Irma Acosta de Fortín (PN) y Dilma Quezada de Martínez (PL), quienes repitieron en las elecciones de 1981, y con ellas se inicia la participación de las mujeres en cargos de elección popular. Durante los procesos electorales realizados el último tramo del siglo XX.
Las mujeres no llegaron al 10% de representación en el Congreso Nacional, entre 1998 y 2001 se obtuvo el mayor registro con 12 parlamentarias mujeres frente a 116 hombres, para un total de 128 diputados que integraron ese poder del Estado. Y de lo que va del siglo XXI, la mayor representación la obtuvieron las mujeres en el periodo 2014-2018, cuando el Congreso Nacional estaba integrado por 33 diputadas frente a 95 diputados, las mujeres representaban el 25.8 del parlamento.
En el periodo actual, 2018-2022, la representación se redujo en seis plazas que equivalen al 4.1%. Organizaciones de mujeres desde fuera de los partidos políticos, y mujeres desde el interior de los mismos han impulsado leyes y logrado cuotas de participación, insuficientes todavía para alcanzar una participación equitativa, pero sin duda la asignación de cuota y la alternancia en la posición en la
papeleta ha contribuido a que más mujeres logren un puesto en el Congreso Nacional; menos ha sido la participación de las mujeres como candidatas a los gobiernos locales.
Elecciones primarias 2021
Según el estudio, 12 departamentos tienen número impar de diputados, y al ser un hombre el primero en la lista, genera la mayoría de representación de hombres como aspirantes a diputados. Y es igual la diferencia en los tres partidos políticos.
En los comicios primarios, en el Partido Nacional corren para diputados propietarios 138 hombres y 118 mujeres; en el Partido Liberal son 204 precandidatos hombres y 180 mujeres, mientras que en Libre son 621 precandidatos hombres y 467 mujeres.
En el Partido Nacional de los 61 escaños que logró para el período 2018-2022 en la Cámara Legislativa, 45 buscan la reelección y 16 no repiten, de los que ya no aspiran 13 son hombres y tres mujeres; de los hombres que ya no aspiran, algunos van corriendo para otros cargos como la Presidencia de la República y para alcalde.
Partido Nacional
El Partido Nacional tiene actualmente 45 diputados que aspiran a ser reelectos para el periodo 2022-2026; partiendo del supuesto que son diputados con una presencia importante en sus departamentos pueden salir reelectos; además, si mantiene los 61 puestos actuales, este partido tiene 211 nuevos aspirantes para 16 puestos. Debido a que es el partido con menor número de movimientos internos, la cantidad de aspirantes es menor que sus dos contendientes.
En el movimiento Unidad y Esperanza del PN, que lidera el actual alcalde capitalino Nasry Juan Asfura Zablah, la diferencia entre 68 aspirantes a diputados hombres y 60 mujeres, aún con la alternancia, se produce por aquellos departamentos de representación de número impar de diputados.
En este movimiento, de los 128 postulantes a diputados al Congreso Nacional, 68 son hombres y 60 son mujeres; en cuanto al primero en la lista de precandidatos por departamento, 14 son hombres y solamente cuatro mujeres; en tanto que los aspirantes a alcalde por cabecera departamental, 15 son varones y solamente tres féminas.
En términos porcentuales en Unidad y Esperanza un 53% de los precandidatos a diputados son hombres y 47% mujeres; en cuanto a la primera posición por la planilla de cada departamento 78% son hombres y un 22% mujeres y en cuanto a los aspirantes a alcalde en las cabeceras departamentales un 83% son hombres y 17% mujeres.
Mientras tanto, en el movimiento Juntos Podemos que lidera el presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, de los 128 postulantes a diputados, 70 son hombres y 58 mujeres; en los primeros en la lista por departamento, 17 son hombres y solo una es mujer; mientras que en los aspirantes a alcalde en las cabeceras departamentales 16 son hombres y solamente dos mujeres.
En el porcentaje de precandidatos a diputados por sexo, un 55% son hombres y 45% mujeres; mientras que en la primera posición por departamento un 94% son hombres y 6% mujeres y entre los precandidatos a alcalde en las cabeceras departamentales un 89% son hombres y 11% mujeres.
Partido Liberal
En las elecciones generales de 2017, el PL obtuvo 26 puestos en el Congreso Nacional, para el periodo 2018-2022, de estos, 22 van por la reelección y cuatro, todos hombres, no se presentan, en algunos casos porque están optando a otro cargo de elección popular, incluyendo la aspiración presidencial.
Si partimos de que el PL mantiene los 26 puestos que obtuvo en 2017 y que los diputados que van a la reelección logran su propósito, el PL tiene a 362 aspirantes compitiendo por cuatro plazas vacantes en el Congreso Nacional.
En el movimiento La Esperanza de Honduras que lidera el actual diputado Ángel Darío Banegas, de los 128 postulantes a diputados 67 son hombres y 61 mujeres; en cuanto al primero en la lista en los departamentos 13 son hombres y cinco mujeres; y en cuanto a aspirantes a alcaldes en las cabeceras departamentales 17 son hombres y solamente una es mujer.
Respecto a los precandidatos a diputados por sexo, en términos porcentuales, un 52% son hombres y un 48% mujeres; en cuanto a los aspirantes que van en la primera posición en los departamentos, un 72% son hombres y un 28% mujeres, y en los aspirantes a alcalde en las cabeceras departamentales un 94% son hombres y un 6% mujeres.
En el movimiento Recuperar Honduras, que encabeza Luis Zelaya como precandidato presidencial, en el nivel de diputados de los 128 postulantes, 69 son hombres y 59 mujeres; entre los que figuran de primero en la nómina en los departamentos, 16 son hombres y dos mujeres y en los candidatos a alcalde en las cabeceras departamentales, 16 son hombres y dos mujeres.
En términos porcentuales, entre los aspirantes a diputados clasificados por sexo, un 54% son hombres y 46 por ciento mujeres; en la figuración de los primeros en la planilla por departamento un 89% son hombres y un 11% mujeres; y en cuanto a precandidatos a alcaldes en las cabeceras departamentales por género, un 89% son hombres y un 11% mujeres.
En el movimiento Yani Presidente, que lidera Yani Benjamín Rosenthal Hidalgo, de los 128 postulantes a diputados, 68 son hombres y 60 mujeres; de los precandidatos que van en la primera posición en los departamentos, 16 son hombres y dos mujeres; y respecto a los candidatos a alcalde en las cabeceras departamentales, 17 son hombres y solamente una es mujer.
En el porcentaje por sexo de los aspirantes a diputados, un 53% son hombres y 47% mujeres; entre los que figuran como primer aspirante por departamento, un 89% son hombres y un 11% mujeres; y en cuanto a los aspirantes a alcalde en las cabeceras departamentales un 94% son Hombres y 6% mujeres.
Partido Libre
El partido Libertad y Refundación obtuvo en las elecciones generales del año 2017, 30 puestos para diputados en el Congreso Nacional, de ellos 20 están corriendo para la reelección y 10 no se presentan como aspirantes en las elecciones primarias, de ellos, siete son hombres y tres son mujeres.
Partiendo de los mismos supuestos que un diputado que va a la reelección tiene posibilidades de ser electo y que Libre conserva sus 30 puestos actuales, este partido tienen a 968 aspirantes compitiendo por 10 puestos de diputados que no están compitiendo para ir a una reelección.
En este partido son 335 precandidatos a diputados hombres y 297 mujeres, de los cuales, en la primera posición por departamento, 68 son hombres y nueve mujeres.
En la alianza de movimientos que respaldan la precandidatura presidencial de Xiomara Castro (FRP/POR/Pueblo Libre/M-28/Somos+), de los precandidatos a alcalde un 53% son hombres y un 47% mujeres; en los aspirantes que ocupan la primera posición en los departamentos un 88% son hombres y un 22% mujeres.
En el movimiento Honduras Libre, que encabeza el activista de Derechos Humanos, Wilfredo Méndez, de los 118 postulantes a diputados 63 son hombres y 55 mujeres y en los primeros en la nomina por departamento, 14 son hombres y cuatro mujeres.
Los precandidatos a diputados por sexo, representa un 53% hombres y un 47% mujeres y en cuanto a los que encabezan las planillas en los departamentos un 78% son hombres y un 22% mujeres.
En el movimiento Nueva Corriente que encabeza Carlos Eduardo Reina García, en sus 128 postulantes a diputados 70 son hombres y 58 mujeres y en los primeros en la lista de los aspirantes por departamento 16 son hombres y dos mujeres.
En términos porcentuales, entre los aspirantes a diputados un 55% son hombres y 45% mujeres y entre los que encabezan la nómina un 89% son hombres y un 11% mujeres.
Finalmente, en el partido Libre, en el movimiento 5 de Julio que lidera el economista Jorge Nelson Ávila Gutiérrez, de los 100 postulantes a diputados 53 son hombres y 47 mujeres y entre los que van encabezando las planillas en los departamentos nueve son hombres y tres mujeres.
Respecto al porcentaje por sexo de los aspirantes a diputados, un 53% son hombres y 47% mujeres y respecto a los que encabezan la planilla en cada departamento un 75% son hombres y un 25% mujeres.
Reticencia de partidos
La reticencia de los partidos políticos a integrar a la mujer cargos de primera línea en el Poder Ejecutivo también ha estado presente. Diez años después que la mujer conquistara el derecho al sufragio, es nombrada en 1965 como secretaria del Trabajo y Previsión Social, Alba Alonso de Quezada durante el régimen de Oswaldo López Arellano (1963-1971), lo que abrió el camino para que otras mujeres ocuparan cargos similares, al menos una en cada gabinete de gobierno o régimen posteriores.
Gertrudis Bográn de Well está registrada como la primera mujer que se desempeñó como ministra de Educación, durante el gobierno de Ramón Ernesto Cruz (PN, 1971-1972) y en adelante, tres mujeres fueron nombradas para este mismo cargo: en el régimen de facto de Juan Alberto Melgar (1975-1978) nombra en la misma secretaría a Lidia Williams de Arias; el primer presidente de la época democrática, Roberto Suazo Córdoba (PL, 1982-1986) nombra en el mismo ministerio a Alma Rodas de Fiallos; y el gobierno de José Simón Azcona (PL, 1986-1990) continua, al nombrar siempre en la Secretaría de Educación a Elisa Valle de Martínez Pavetti.
Hasta aquí, la constante es una mujer en cada uno de estos gobiernos, independientemente si fue del PN, del PL o un gobierno de facto; y para todas ellas, la Secretaría de Educación, con excepción del primer caso que se nombra en la Secretaría de Trabajo y Previsión Social. Un concepto limitado en el que se asocia el género femenino y la tarea educativa. Y con el gobierno de Azcona se cierra el ciclo Mujeres a la Secretaría de Educación.
Rafael Leonardo Callejas (PN, 1990-1994), integra también una mujer a su gabinete, pero en la Secretaría de Turismo, allí nombra a Sonia Canales de Mendieta; Carlos Roberto Reina tiene a Guadalupe Jerezano como una de los tres designados presidenciales, Zenobia Rodas de León Gómez es nombrada ministra de educación, de nuevo, educación.
Carlos Roberto Flores Facussé (PL-1998-2002), además de llevar a Gladis Caballero de Arévalo como designada presidencial, rompe esquemas al nombrar a Gabriela Núñez en la Secretaría de Finanzas y a Elizabeth Chiuz Sierra en la Secretaría de Seguridad, todavía hoy es la primera y única mujer en haber ocupado ese cargo.
Pero la irrupción de las mujeres al Poder Ejecutivo llega con el gobierno de Manuel Zelaya (PL, 2006-Junio 2009), algunas nombradas desde el inicio de su gobierno: Mayra Mejía (Recursos Naturales y Ambiente; y luego en la Secretaría de Trabajo), Patricia Panting (Recursos Naturales y Ambiente), Miriam Mejía y Lizzie Azcona (Industria y Comercio), Rixi Moncada (primero en Turismo; luego en Energía; y al final en la Secretaría de Trabajo y Previsión Social), Karen Zelaya (Cooperación Internacional), Patricia Rodas (Relaciones Exteriores), Jenny Meza y Elsa Palou (Secretaría de Salud).
En este gobierno se produjo una amplia rotación en los cargos, algunas de las funcionarias circularon por tres Secretarías de Estado, y en otros casos hubo gran volatilidad, secretarias de Estado con permanencia en los cargos de menos de un año; no obstante, estas características, fue un logro importante que las mujeres se despeñaran en ministerios cuyas tareas habían permanecido asignadas solo a hombres. OM