Roma– El número de muertos este año por el virus del Nilo Occidental en Italia ha ascendido a 12, según confirmó este martes el ministro italiano de Sanidad, Orazio Schillaci, quien añadió que hay 145 casos de infección, pero que «la situación está bajo control».
«La situación está bajo control, se supervisa constantemente y está en línea con lo visto en años anteriores», explicó el ministro durante su comparecencia ante el Senado para informar sobre el estado de los casos del virus en Italia y las medidas adoptadas.
Del total de 145 casos, 59 han evolucionado en forma neuroinvasiva, la variante más grave de la enfermedad, mientras que 75 presentaron fiebre y 11 fueron asintomáticos.
En el último boletín, publicado hace apenas una semana, se notificaron 89 casos y ocho muertes, cifra que casi triplicaba la registrada quince días antes.
Las regiones más afectadas son Lacio, cuya capital es Roma, con 93 casos; Campania (sur), con 24; Véneto (norte), con 14; Piamonte (norte), con 4; Lombardía (norte), con 3; Emilia-Romaña (norte), con 4; Cerdeña (sur), con 2, y Apulia, con 1.
El virus, transmitido principalmente por mosquitos del género Culex, tiene como reservorios a aves migratorias y gaviotas. El Ministerio de Sanidad insiste en medidas preventivas como el uso de repelente, ropa adecuada y la eliminación de aguas estancadas.
Como parte de las medidas de prevención, Schillaci explicó que el Plan Nacional prevé «desinfecciones estratégicas, que deben iniciarse ya en marzo y ajustarse al desarrollo estacional de los mosquitos, usando formulaciones adecuadas para limitar el desarrollo de resistencias».
Italia «tiene una combinación de factores favorables para la circulación del virus del Nilo Occidental y otros arbovirus» debido a su ubicación a lo largo de rutas migratorias de aves silvestres, su temperatura y hábitats propicios para la multiplicación de vectores, agregó.
Respecto a la infección, el ministro señaló que la mayoría de las personas picadas por mosquitos infectados no presenta síntomas, 1 de cada 5 puede tener fiebre y síntomas leves, y solo 1 de cada 150 desarrolla una enfermedad grave como encefalitis o meningitis.
Schillaci insistió en que la mortalidad asociada a las formas graves «sigue siendo rara» y añadió que «estudios internacionales indican una tasa inferior al 10 % entre los pacientes con manifestaciones neuroinvasivas, con un riesgo más elevado en personas mayores o inmunocomprometidas».
Durante su comparecencia ante el Senado, el ministro de Sanidad recordó que, pese a que en 2018 y 2022 se registraron más casos, «no recuerda alarmas mediáticas», a pesar de que en 2018 hubo 618 casos y 49 muertes y en 2022 se registraron 728 casos y 51 muertes.
En comparación con temporadas anteriores, en 2024 se registraron 484 casos, de los cuales 266 fueron en forma neuroinvasiva, con un total de 36 fallecimientos, mientras que en 2023 se notificaron 394 casos (195 neuroinvasivos) y 32 muertes. EFE/ir