Tegucigalpa – Un militar estadounidense, identificado como Ángelo Marciano Parisano, fue encontrado sin vida en Comayagua, Honduras, el 3 de mayo de 2025, por lo que las autoridades nacionales investigan las causas de su deceso.
– Se debilita la hipótesis de robo como móvil en muerte de militar norteamericano en Comayagua; indicios apuntan a otra circunstancia.
Las autoridades hondureñas identificaron al individuo como un ciudadano estadounidense. Tras realizar una verificación de personal en la Base Aérea Soto Cano (SCAB), se confirmó que se trataba de un miembro del servicio asignado a esa instalación militar.
La Policía Nacional de Honduras (PNH) encabeza la investigación para determinar la causa de la muerte, en coordinación con la Embajada de los Estados Unidos en Honduras y la División de Investigación Criminal del Ejército de los Estados Unidos.
En respeto a la privacidad de la familia, no se divulgarán más detalles, informaron fuentes norteamericanas.
Versión policial
La Policía Nacional de Honduras, a través de sus unidades especializadas, informó sobre las diligencias técnico-científicas efectuadas en torno al hallazgo sin signos vitales de un ciudadano militar de nacionalidad estadounidense, hecho ocurrido el sábado en la ciudad de Comayagua.
A las 14:00 horas, se recibió una denuncia vía llamada telefónica, notificando que en las inmediaciones de la colonia Lomas del Río, específicamente a orillas del Río Chiquito, se encontraba el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino. De inmediato, equipos policiales se desplazaron al sitio del suceso, activando los protocolos correspondientes para la preservación de la escena y el inicio de las diligencias periciales.
Se trataba de Ángelo Marciano Parisano, de 25 años, Primer Teniente del Ejército de los Estados Unidos de América, originario de Cíbolo, Texas.
Posteriormente, se ejecutó un procedimiento de inspección minucioso del perímetro y una búsqueda sistemática sectorizada en el área, durante aproximadamente dos horas, logrando localizar un teléfono celular supuestamente de propiedad de la víctima. Este presentaba se encontraba parcialmente destruido por causas pendientes de determinar y pueden ser efecto del fuego, se realizarán las pericias necesarias para poder determinar científicamente lo sucedido. Dicho dispositivo fue fijado fotográficamente, embalado y asegurado conforme a los protocolos de cadena de custodia vigentes.
Desde el inicio de las diligencias, se contó con la supervisión directa del señor Jefe Regional, Comisionado de Policía Ponce Canales, quien coordinó in situ las acciones efectuadas por personal de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Dirección Policial Anti-Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO) y Dirección de Inteligencia Policial (DIPOL), conforme a sus competencias.
Como parte de la línea investigativa, se ha procedido a la verificación y recuperación de imágenes de todas las cámaras de seguridad ubicadas en el trayecto desde el establecimiento donde fue visto por última vez acompañado de otros ciudadanos más hasta el sitio de hallazgo. De igual forma, se ha previsto la toma de declaración formal a personas que compartieron las últimas horas con la víctima, así como a testigos vinculadas al entorno inmediato.
Las primeras diligencias descartan el robo como móvil del hecho violento y se manejan hipótesis consolidadas con base en indicios periciales, teniendo ya identificados a sospechosos y una línea de investigación activa, la cual, por razones estratégicas y de confidencialidad, no será divulgada en esta etapa. JS