La comisión se integró tras el encuentro del alcalde de Tegucigalpa, Ricardo Álvarez, y el presidente de la República, Manuel Zelaya, la noche del viernes, en la que se reiteró la petición de las autoridades municipales de que el Gobierno asigne 3.000 millones de lempiras para proyectos de infraestructura en las zonas de riesgo de la ciudad.
Álvarez se hizo acompañar en la reunión de representantes de la iglesia católica y evangélica, de la Cámara del Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT) y de la Comisión de Transparencia, entre otros.
En la cita participaron también el vicepresidente, Elvin Santos, el ministro de la Presidencia, Yani Rosenthal, el ministro del FHIS, César Salgado, y el gerente del SANAA, Jorge Méndez.
Las autoridades municipales plantearon al presidente y sus ministros el plan de proyectos que –según un estudio de la cooperación japonesa- deben ejecutarse en la ciudad a corto, mediano y largo plazo, entre los que resalta la construcción de 700 kilómetros lineales de cunetas y muros de contención en las colonias más vulnerables de la ciudad.
Informaron de que para enfrentar la problemática han decidido destinar prácticamente todos los recursos propios de que dispone en el presente año, así como los recursos presupuestados para los próximos cinco años
Álvarez instó al presidente a solicitar a la cooperación internacional que le otorgue prioridad a los programas y proyectos de mitigación de desastres, especialmente en la capital, con el objetivo de que los países y organismos amigos consideren este tema en sus agendas de cooperación hacia Honduras.
La comisión que identificará las fuentes de financiación quedó integrada por Santos, Rosenthal y Álvarez.
Santos informó que la delegación será auxiliada por un equipo técnico, y que a más tardar el 30 de este mes tendrá identificada la cantidad de proyectos que dicha comisión identificará como los más importantes para contrarrestar las zonas vulnerables de la ciudad.
El diálogo sostenido entre las autoridades edilicias y el gobierno será fructífero, porque lo que se busca es la unificación de criterios para resolver los problemas de los capitalinos, indicó.
Optimismo
El jefe municipal, igual que sus acompañantes, dijo estar optimista porque considera que el mandatario responderá en forma positiva al conocer los antecedentes del municipio tras el paso del huracán y tormenta tropical “Mitch”, que dejó muy vulnerable la ciudad.
Manifestó que es importante conocer de cuánto será la asignación de recursos que hará el gobierno, pues la municipalidad ya tiene destinada una cantidad como contraparte, para la ejecución de obras preventivas, lo que también es del conocimiento del presidente.
“De eso se trata, o sea en una manera amigable, amistosa, buscar cómo podemos encontrar recursos suficientes para hacer las obras que son tan necesarias”, consideró.
Reiteró que no es preciso que el gobierno asigne de una sola vez los tres mil millones de lempiras que solicita, sino hacerlo mediante la definición de prioridades.
“Esta no es una ciudad de liberales o nacionalistas, esta es la ciudad de todos los hondureños, es la capital de la República, donde se genera el 45 por ciento de los ingresos fiscales y por esta vez estamos pidiendo esa cantidad para que salvemos a más de 400 mil pobres que están el las zonas de mayor riesgo”, sostuvo.
Haber iniciado pláticas con el gobernante es un paso trascendental porque deja atrás el sectarismo y lo mejor es que el 30 de octubre le comunicarán cuál será la cantidad de recursos que se asignarán para invertirlos en la reducción de la vulnerabilidad, apuntó.
Asimismo urgió a las autoridades centrales a desembolsar los recursos correspondientes al Decreto 368-2005, el cinco por ciento del Presupuesto General de la República y la Estrategia para la Reducción de la Pobreza, ERP, que le corresponden a la municipalidad para iniciar a partir de enero, una vez pasadas las lluvias, las obras señaladas.
En días pasados Álvarez se presentó al Congreso Nacional, donde expuso la problemática existente en diferentes sectores de la capital como producto de las inundaciones, deslizamientos y hundimientos de tierra que provocan las lluvias, lo que originó el respaldo unánime de los diputados de las cinco bancadas representadas en ese Poder del Estado.







