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Instan al MP actuar de oficio en caso de alto oficial que reclama edificio de Casamata como suyo

Tegucigalpa – Después de conocerse que el general (retirado) y exdirector de la Policía, Salomón de Jesús Escoto Salinas, demanda que se le pague una cantidad millonaria de dinero por el alquiler del cuartel general de Casamata ya que dice que es de su propiedad, la experta en materia de seguridad y criminalística, Arabesca Sánchez, exigió al Ministerio Público que se investigue el caso de oficio porque evidentemente podría tratarse de un acto más de corrupción.

– Señalo que la MACCIH tiene en este caso una buena oportunidad para iniciar a investigar la corrupción a lo interior del cuerpo del orden.

“Entiendo que hoy se comenzará una revisión rigurosa en el registro de la propiedad para verificar la escritura pública que el edificio del cuartel general de la Policía Nacional ha tenido. Si alguna vez en el tiempo ese edificio ha sido propiedad de un policía creo que el Ministerio Público debe comenzar una investigación profunda sobre ese tema”, dijo Sánchez.

Y agregó que “habría un conflicto de intereses bastante fuerte, no se puede ser funcionario policial dueño del edificio donde está la institución en la que labora, y cobrar renta y alquileres, y aún por encima querer que la Comisión Depuradora lo separe con pago prestaciones”.

La experta en criminalística demandó al Ministerio Público que no espere que la Comisión Depuradora le pida que investigue el caso porque se debe actuar de oficio.

“El Ministerio Público tiene una tarea de oficio, hay un acto de corrupción y lo primero que hay que constatar la escritura pública y si aparece como dueño este personaje policial u otro miembro de la institución debe comenzar el requerimiento fiscal”, declaró.

Sánchez apuntó que “no se puede estar pagando prestaciones a alguien que está incurriendo a un acto criminal. Los dueños de ese edificio durante todos los años si son policías o familiares se deben constatar para ser investigados”.

Esta semana trascendió que el general Escoto Salinas, mediante un apoderado legal que laboró por años en la Secretaría de Seguridad, reclama como de su propiedad el edificio del cuartel de Casamata.

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