Tegucigalpa – Los hondureños privados de libertad en diferentes cárceles del mundo suman mil 105, la mayoría de ellos en Centro y Norte América, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional a través del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho).
– Principalmente los hondureños son detenidos por: abuso sexual, homicidios, portador de estupefacientes, extorsión, robos, secuestros, tráfico de personas, violaciones a la ley, según el informe.
Conmigho subraya que, de acuerdo a reportes consulares, del total de hondureños privados de libertad en el extranjero, un 18 por ciento son mujeres y el 82 % hombres.
Asimismo, indica que los hondureños son detenidos principalmente por los delitos de: abuso sexual, homicidios, portar estupefacientes, extorsión, robos, secuestros, tráfico de personas entre otras violaciones a la ley.
En ese orden, señala que Centroamérica alberga en sus cárceles a 320 connacionales, entre ellos 15 mujeres y 305 hombres.
Entre tanto, Norteamérica aglutina en centros de detención a 722 hondureños, entre ellos 175 mujeres y 547 hombres.
No obstante, también en Europa y Suramérica se encuentran hondureños presos. El continente europeo contabiliza 50 hondureños presos y América del Sur aloja, el menor porcentaje, con 13 casos registrados.
En cuanto a ciudades, son Miami en La Florida, Estados Unidos y Tapachula en México, donde más hondureños privados de libertad se registran.
La privación de libertad es otro aspecto de la migración que en Honduras registra cada año unos 100 mil emigrantes.
Las principales causas de la emigración son la violencia y la falta de oportunidades, igualmente la reunificación familiar, indican estudios oficiales e independientes.
Recientemente este medio de comunicación informaba sobre el reencuentro entre madre e hija (privada de libertad) en Zacatecas, México.
Se trata de doña Ángela Aranda Maradiaga quien se rencontró con su hija Hilda Aracely Aranda a quien no veía desde hace cuatro años cuando emigró desde El Progreso, Yoro.
Pese a que ya se cumplen cuatro años de estará presa la hondureña aún no recibe una sentencia ni una causación oficial.
Casos como el de Hilda se repiten en todas las partes del mundo donde hoy en día se encuentran hondureños guardando prisión, algunos con conocimiento de los familiares y otros no.
