«Por segunda vez en sus 47 años de existencia, la elección del funcionario de mayor jerarquía en la conducción del Banco fue realizada entre una terna seleccionada con base a un concurso entre ciudadanos de los cinco países centroamericanos fundadores del BCIE», precisó un comunicado.
La elección de Rishbieth se realizó en el marco de la LXII Asamblea Extraordinaria de Gobernadores que inició ayer en esta capital, y en la que el principal punto de agenda fue la designación del sustituto del nicaragüense Harry Brautigam, quien falleció meses atrás en un accidente aéreo.
El nuevo presidente ejecutivo del BCIE, que tomará posesión del cargo el próximo 1 de diciembre, se incorporó a esa institución financiera regional en 1995 desempeñando el cargo de Tesorero, y en 2003 fue nombrado como gerente financiero.
El año pasado fue nombrado como vicepresidente ejecutivo de la institución en base a un concurso entre ciudadanos de todos los países miembros del Banco.
Dentro de los principales logros que se le atribuyen a Rischbieth en su carrera como parte de la administración del BCIE, «destacan el haber llevado al Banco al rango de grado de inversión con las principales agencias calificadoras a nivel mundial».
En la asamblea extraordinaria de Gobernadores del BCIE, que concluirá hoy, participan, por Guatemala, Juan Alberto Fuentes Knight Ministro de Finanzas Públicas; por El Salvador, Ricardo Esmahan Daubuisson, Ministro de Economía; por Honduras, Hugo Castillo Aldana, Viceministro de Crédito e Inversión Pública; por Nicaragua, Antenor Rosales Bolaños, presidente del Banco Central de Nicaragua; por Costa Rica, Guillermo Zúñiga Chavez, Presidente de la Asamblea y Ministro de Hacienda.
También estuvieron presentes los representantes de México, Taiwán, Argentina, Colombia, España, República Dominicana y Panamá, países socios extrarregionales del BCIE.
El BCIE, fundado en 1960 por Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua, es la principal institución económica de la integración centroamericana; en 2007 sus activos alcanzaron casi 5.000 millones de dólares y sus préstamos a la región casi 4.000 millones, y goza de calificaciones de riesgo en grado A de las firmas Standard %26amp; Poor’s, Moody’s, Fitch Ratings y Japan Credit Rating.
