Tegucigalpa – Honduras registra al menos 80 muertes de mujeres en el presente año, por lo que el luto y dolor sigue embargando a familias que ven partir de forma violenta a una madre, una hija o una abuela.
-La impunidad ronda el 90% de los casos.
-En promedio, una mujer es asesinada cada dos días en Honduras.
Los crímenes en su mayoría son cometidos por la pareja o expareja de las féminas, y el arma de fuego es la que se utiliza en la mayoría de los crímenes.
La saña y las formas de muertes también han llamado la atención en el presente año.
En el presente mes ya se registran siete hechos violentos en los primeros 10 días, lo que preocupa a las organizaciones feministas que exigen políticas públicas para la protección de las mujeres y sus familias.

Ocho asesinatos en 10 días de mayo
El 1 de mayo, una mujer de la tercera edad fue asesinada a puñaladas por su nieto en el sector El Higuerito en el municipio de Trujillo, departamento de Colón.
La occisa fue identificada como María Fernanda Medina (62). Mientras que el autor del crimen responde al nombre de Pedro Antonio García Alonzo, nieto de la víctima, y que ya fue detenido por los agentes policiales.
Se informó que el nieto de manera sorpresiva se abalanzó contra su abuela y empezó atacar con un arma blanca causándole graves heridas quitándole la vida a la mujer de la tercera edad.
El 2 de mayo, dos mujeres fueron asesinadas en hechos distintos registrados en Juticalpa, Olancho.
Una de las víctimas fue identificada como Adalia Sarahí Moncada y la otra, respondía en vida al nombre de Lesli Fortín.

El 3 de mayo, una madre y su hijo fueron ultimados a balazos en la colonia La Paz en el municipio de La Lima, departamento de Cortés, zona norte de Honduras.
Las víctimas fueron identificadas Nolvia Quintanilla García y Gabriel Isaac García (16).
Ese mismo día, se reportó el hallazgo sin vida de una pareja en el interior de una finca de palma africana en el municipio de Trujillo, departamento de Colón, Caribe hondureño.
Los cuerpos de los fallecidos estaban en un avanzado estado de descomposición y estaban semidesnudos. Se desconoce la identidad de los fallecidos.
El 6 de mayo, una mujer fue encontrada asesinada en una calle en San Antonio de Oriente, Francisco Morazán. Hasta el momento se desconoce la identidad de la víctima quien tiene una edad aproximada de 40 años.
Según se informó la fémina fue encontrada sin vida en una calle de la aldea La Estancia, su cuerpo presentaba heridas de arma blanca tipo machete.
El 9 de mayo, una mujer que fue atacada a disparos junto a su pareja en el el bulevar Suyapa de esta capital hondureña, murió horas después del atentado en el Hospital Escuela.
Y este día 10 de mayo, una mujer fue asesinada en Sulaco, Yoro. La fémina fue identificada como Mirian Aguilar.

Impunidad ronda el 90% de los casos

El director de seguridad de la Asociación Para una Sociedad Más Justa (ASJ), Nelson Casteñeda, señaló que los altos índices de feminicidios se suman a la impunidad que ronda el 90 % de los casos.
Lamentó que Honduras sea un país altamente violento en contra de las mujeres.
Cuestionó la falta de política eficiente para resguardar la vida de los grupos vulnerables dentro de la sociedad hondureña.
Castañeda demandó al gobierno y su engranaje ministerial elaborar una estrategia para proteger la vida de las mujeres y a través de alguna metodología prevenir los sucesos violentos que laceran la existencia de las féminas.

Uno de los países más violento para las mujeres
“Pareciera que este fenómeno no le quita el sueño al gobierno y nos posiciona como uno de los países más violentos en contra del género femenino”, señaló Castañeda.
El representante de sociedad civil cuestionó qué no existe voluntad política en resguardar la vida de las mujeres.
“En el Ministerio Público hay intenciones, pero hay muy poco recurso humano, sin embargo, qué pasa con las investigaciones a lo interno de la Policía Nacional. Hacia dónde se destinan esos recursos, esos programas de prevención y cuidado de las mujeres”, expuso.
Finalmente, cuestionó que en el país sigan ocurriendo masacres a tenor de un inoperante estado de excepción que poco ha servido para detener este tipo de hechos violentos. IR