Guatemala– Un hombre de 59 años se convirtió este martes en la 27 víctima fatal del COVID-19 en Guatemala, país que además contabilizó 85 nuevos contagios, una cifra que iguala el registro diario más alto desde que se detectó el primer caso el 13 de marzo.
El ministro de Salud guatemalteco, Hugo Monroy, explicó en cadena nacional que son 1.199 los contagiados en total en el país, incluyendo los 85 nuevos casos detectados entre la noche del lunes y este martes.
El funcionario detalló que en las últimas 24 horas se llevaron a cabo 529 pruebas y aún están por procesarse otras 368 realizadas en el día, para un total de 897 tests realizados este martes.
Monroy valoró positivamente la recuperación de «un paciente de 94 años», quien fue operado para un «reemplazo total de cadera izquierda» siendo un «éxito» la intervención quirúrgica pese a la enfermedad, y felicitó a los médicos a cargo.
Guatemala había sumado el domingo 85 nuevos casos del coronavirus, la mayor cantidad en un día desde que fue detectado el primer caso por las autoridades el 13 de marzo en un hombre procedente de Europa.
Según datos oficiales, el 61 por ciento de los 1.199 casos se encuentran localizados en la región central del país, específicamente en los departamentos de Guatemala, Chimaltenango y Sacatepéquez.
El resto de casos se encuentran expandidos por el territorio guatemalteco, especialmente en el este, colindante con México (11 %), y al oeste, en departamentos fronterizos con Honduras (12 %).
La Procuraduría de los Derechos Humanos ha reportado hasta la semana pasada al menos 23 miembros del personal de salud contagiados del COVID-19 en varios hospitales y centros de salud del territorio guatemalteco.
La nación centroamericana se encuentra bajo cuarentena desde el 15 de marzo y bajo toque de queda desde el 21 de marzo, por orden del presidente del país, Alejandro Giammattei, quien dispuso la reapertura gradual del país desde el pasado 3 de mayo.
Giammattei, ordenó el 15 de marzo la suspensión de labores a nivel nacional, tanto en el plano público como privado, además del cese del transporte público y las clases a todo nivel educativo.
El mandatario, sin embargo, reculó un día después, el 16 de marzo, y afirmó que cualquier empresa que quisiera podía trabajar siempre y cuando le notificaran al Estado y además consiguieran transporte público para sus trabajadores.
El pasado 3 de mayo, el gobernante ordenó la reapertura gradual del país, pese a que había advertido en reiteradas ocasiones que el pico de la enfermedad llegaría en las primeras dos semanas de mayo.
El país ha registrado masiva movilidad en las últimas semanas y algunas aglomeraciones de personas en diversos puntos del país, como en el Día de la Madre el pasado 10 de mayo o un sepelio masivo por el asesinato de un alcalde municipal.
El alcalde municipal de Quetzaltenango, la segunda ciudad más grande de Guatemala, Juan Fernando López, pidió este martes un confinamiento «total» por varios días debido al COVID-19, o, de lo contrario, «vamos a morir muchos».
López explicó en declaraciones a periodistas que quisiera solicitarle abiertamente al presidente del país un confinamiento de «tres a cuatro días», para poder contener la enfermedad.
«Hoy es el momento. Yo no lo puedo hacer. Tengo la autonomía, pero no lo puedo hacer. Tiene que ser el presidente constitucional el que debe dar la ordenanza», subrayó el alcalde de Quetzaltenango, ubicado 175 kilómetros al oeste de Ciudad de Guatemala.
