Washington – Abordar el crimen organizado como un tema del continente americano y evitar que el problema se desplace a otros países del área, fue el llamado que el presidente Juan Orlando Hernández le hizo este jueves a la Junta Interamericana de Defensa (JID).
– Los logros de Honduras pasan por el fortalecimiento de los operadores de justicia, la articulación de las fuerzas del orden y la participación de militares en el resguardo de la ciudadanía.
El gobernante hondureño, invitado por la JID, fue el orador principal en la ceremonia de conmemoración del 75 aniversario de este organismo adscrito a la Organización de Estados Americanos (OEA).
La ceremonia estuvo presidida por el presidente del Consejo de Delegados y el director la JID, Gabriel Pinilla y Mauricio Gonsalves, respectivamente; el secretario adjunto de la OEA, Néstor Méndez, y el presidente hondureño Juan Orlando Hernández.
En su ponencia el mandatario hondureño explicó la situación actual de Honduras, así como todo el proceso que se ha llevado a cabo para poder hacerle la guerra al crimen organizado, las pandillas, robustecer los operadores de justica y el sistema carcelario, entre otras acciones para fortalecer la seguridad del país y la región.
Indicó que, a pesar de que Honduras está teniendo avances significativos en el combate al narcotráfico, este tema debe ser abordado a nivel del continente porque, de lo contrario, el problema sólo se está desplazando a otra área.
“Mi petición como ciudadano de las Américas es solicitarles que entendamos que lo que eran amenazas antes hoy son realidades y que este abordaje tiene que ser hemisférico, bajo los principios de responsabilidades compartidas, aunque diferenciadas; si no, no vamos a resolver el problema”, manifestó.
“Reconozcamos que tenemos un serio problema que tenemos que resolver, hay que debatir estos temas porque muchas veces se mira como en los años 80 como en la época de la Guerra Fría, y hoy enfrentamos otra realidad”, aseveró el mandatario hondureño ante los representantes de Defensa de 28 naciones del continente.
El presidente Hernández indicó que en Honduras el tema de drogas es un tema de vida o muerte.
“¿Cuál es la diferencia de un ser humano decapitado por un grupo terrorista como ISIS o un ser humano decapitado por una banda criminal en Mesoamérica? Para mí es la misma persona, el mismo valor. ¿Por qué estas escenas no captan la atención del mundo?”, consultó.
Logros significativos
El presidente Hernández aseguró que Honduras está teniendo éxito, pero el fenómeno del crimen organizado se está movilizando a otros países.
“Si seguimos así lo que estamos haciendo es nada más desviando el problema a otros pueblos del continente; si lo miro como hondureño podemos tener éxito estos años, pero eventualmente puede regresar», advirtió.
Honduras en el 2011 llego a ser el país más violento de la Tierra. “Jamás nuestra República había sufrido una ola delincuencial tan trágica como esa”, recordó el mandatario a la vez que indicó que esto fue a consecuencia del tráfico de drogas del Sur al Norte que pasa por Centroamérica.
Explicó que, tras implementar acciones para hacerle frente al crimen organizado, actualmente Honduras ha logrado reducir la tasa de homicidios en más de 30 puntos.
“Esta es la mejor forma de demostrar la relación directa de la violencia con el narcotráfico, que es un fenómeno transnacional y muchas veces más fuerte en recursos que un Estado como el nuestro”, aseveró.
Detalló que esto es el resultado de una serie de medidas que impulsó cuando fue presidente del Congreso Nacional, entre las que se destaca la creación del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, y luego todos los operadores de justicia, incluyendo las Fuerzas Armadas, participando en las tareas operativas.
Además, se montaron escudos aéreos, terrestres y marítimos para bloquear el paso del crimen organizado y se estructuró una Fuerza de Tarea Trinacional con Guatemala, El Salvador y Honduras que le está haciendo frente al crimen organizado y las pandillas en las zonas fronterizas comunes.
Explicó que también se estructuraron medidas como la extradición de hondureños relacionados con el crimen organizado, incautación de bienes, ley de escuchas y la Tasa de Seguridad, que ha contribuido de forma significativa con combate del crimen, puntualizó.
Asimismo, se determinó “hacer uso de nuestras fuerzas militares al impulsar una Policía Militar que tras un proceso de capacitación hoy forma parte de los entes de seguridad que combate el crimen y resguardan la ciudadanía”, dijo.
«Estamos en la construcción de un nuevo Estado para bien de los hondureños; somos creyentes de la promoción y protección de los Derechos Humanos de nuestro pueblo», manifestó.
El presidente Hernández reconoció que Honduras no hubiera avanzado sin el apoyo de países amigos como Colombia, México, Estados Unidos y los de Centroamérica.
Con honores
El mandatario fue recibido con honores en la Casa del Soldado, sede de la JID, por el presidente del Consejo de Delegados y el director de este organismo, Gabriel Pinilla y Mauricio Gonsalves, respectivamente, así como por la directora del Colegio Interamericano de Defensa, Martha Herb.
La Casa del Soldado es un ícono de identidad de las naciones del hemisferio, ya que en dentro de sus muros los pueblos de América se unen con el propósito de fomentar la confianza y la seguridad del continente.
Antes de iniciar la ceremonia del 75 aniversario de la JID, el presidente Hernández tuvo una reunión privada con las máximas autoridades de este organismo en compañía del representante permanente de Honduras ante la OEA, Leónidas Rosa, y el secretario de la Presidencia, Reinaldo Sánchez.
Posteriormente el mandatario hondureño firmó el Libro de Oro de la JID y hubo un intercambio de regalos con el director Gabriel Pinilla.
