Tegucigalpa – La señora Teresa Colón, hermana del joven Elvis García, quien es una de las dos víctimas mortales en el incidente ocurrido la madrugada del pasado domingo en Iriona, Colón, pidió este miércoles que se haga justicia en este caso ya que los militares de la Fuerza Naval de Honduras (FNH), dispararon en contra de los jóvenes sin razón y no existió ningún enfrentamiento como arguye la institución castrense.
En declaraciones a la radioemisora HRN, ofrecidas este miércoles, Colón aseguró que “no existió un enfrentamiento” entre los militares y las personas que se transportaban en dos vehículos que fueron atacados a disparos por los soldados de la FNH, por lo que pidió que se haga justicia en este caso.
Afirmó que “los jóvenes se encontraban desatascando un vehículo cuando la Fuerza Naval abrió fuego en contra de los civiles”.
Señaló que durante la inspección en el lugar donde se produjo el tiroteo, solo se encontraron los casquillos de las armas de los militares.
“No hay disparos recibidos en la patrulla, no hay militares heridos, no hay evidencia de otras armas que no sean las de los militares y las personas que acompañaban a las víctimas aseguran que no andaban armados y que fueron sorprendidos al ser atacados”, insistió.
En el hecho murió de forma instantánea Joel Palacios Lino y horas después falleció por la gravedad de las heridas Elvis Armando García en el Hospital Regional Atlántida Integrado de La Ceiba.
Ambas muertes han causado la indignación de la comunidad garífuna, que ha exigido al gobierno la expulsión de los militares del departamento de Colón.
Por su parte, el nuevo jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Francisco Isaías Álvarez Urbina, lamentó el hecho en el que dos personas murieron.
Arguyó que las Fuerzas Armadas están sumergidas en una lucha contra la delincuencia, el narcotráfico y todos los flagelos que afectan al país, pero en este caso ya se pusieron a disposición de las autoridades competentes a los miembros de la Fuerza Naval que están involucrados en el incidente ocurrido en Iriona.
Asimismo, se entregaron las armas para que las autoridades puedan hacer su labor, indicó Álvarez Urbina, quien consultado sobre que en la escena del incidente únicamente se encontraron casquillos de las armas de los militares y no hay patrullas tiroteadas, manifestó que no se quiere interferir en la investigación que están realizando las autoridades a las que se les ha ofrecido toda la información que requieran.
Expresó que coincide con la comunidad de Iriona en el sentido de que quieren que en este caso se haga justicia, pero reiteró que ese sector es una zona bastante “caliente” para las actividades del narcotráfico.
Indicó que los narcotraficantes en esa zona usan armas poderosas como el lanzacohetes RPG-7 y fusiles de asalto AK-47 y en octubre pasado en un enfrentamiento con delincuentes miembros de las Fuerzas Armadas resultaron heridos y todavía están sufriendo las secuelas.
Admitió que la comunidad de Iriona está molesta, pero las Fuerzas Armadas no pueden dejar una zona sola, a merced del narcotráfico, porque allí se mueven grandes cantidades de droga y hay una gran narcoactividad.