Tegucigalpa – Mike Vigil exjefe de Operaciones Internacionales de la Administración para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) dijo que hay suficiente evidencia para acusar al expresidente Juan Orlando Hernández, y asegura que la defensa de la causa no tiene futuro ni posibilidades de salir bien librado ante la justicia de Estados Unidos (EEUU).
Inicialmente indicó que el mejor camino que le espera al expresidente hondureño es que se presente y colabore en primer lugar con la justicia de su país, y no esperar que la Corte Suprema de Justicia vaya decidiendo sobre su caso respecto a la acusación de EEUU, porque son cargos fuertes, sólidos y la evidencia es contundente.
Según el exagente de la DEA, “tomando en cuenta que el hermano de expresidente Hernández, fue condenado por narcotráfico, además Geovanny Fuentes (ambos condenados a cadena perpetua más 30 años), la evidencia contra Hernández Alvarado es hasta más fuerte y no le espera una condena menor”, externó.
Vigil reconoció que la administración Hernández “extraditó narcotraficantes hacia Estados Unidos, pero solo a algunos, no a los socios que trabajaban con él en el narcotráfico, aparte aquí no se toma la palabra de un solo individuo, en este caso hay muchos testigos independientes que dicen lo mismo, sobre sobornos para protección de la narcoactividad”.
En ese sentido, el exintegrante de la DEA, agregó que los fiscales de EEUU, son muy conservadores y no harían una acusación formal, sin la evidencia no es contundente, entonces el expresidente de Honduras se puede defender como corresponde, pero en realidad esa defensa no va a proceder.
“Ahora lo que queda es su extradición, porque en realidad el exmandatario, patrocinó el narcotráfico cuando fue presidente del Congreso Nacional y jefe del Poder Ejecutivo, la corrupción que cometió es muy grande, se espera que la Corte Suprema, lo mande a EEUU, la DEA no puede capturarlo, eso le corresponde a la policía hondureña”, concluyó.
La justicia de Estados Unidos, acusa al exgobernante del Partido Nacional, de importación de cocaína, conspiración y vínculos con el crimen organizado. Anteriormente su hermano Juan Antonio Hernández, fue condenado a cadena perpetua más 30 años de prisión por introducir más de 185 toneladas de cocaína al país norteamericano. JP
