Tokio – La presidenta del comité organizador de Tokio 2020, Seiko Hashimoto, afirmó hoy que los atletas participantes en los Juegos estarán «agradecidos» por su celebración después de todas las dificultades que han afrontado debido a la pandemia y pese a las enormes restricciones que tendrán que asumir.
La responsable de la organización expresó su confianza en que los deportistas acogerán con buen ánimo las numerosas reglas que deberán cumplir durante su estancia en Japón y cuya infracción podría conllevar fuertes sanciones, según expresó en una entrevista con un reducido grupo de medios entre los que estaba Efe.
«Creo que, tras el retraso de los Juegos por un año, los atletas han debido contener sus sentimientos mucho tiempo y hay muchos esperando que llegue el momento de participar», señaló Hashimoto cuando restan 31 días para la inauguración de Tokio 2020.
«Los deportistas son plenamente conscientes de la situación que rodea a los Juegos. Creo que están muy agradecidos por el hecho de que vayan a celebrarse finalmente», añadió la expatinadora y medallista olímpica nipona.
Los Juegos se desarrollarán en un formato «burbuja» en el que los deportistas deberán someterse a test de covid de forma diaria y verán limitados sus movimientos exclusivamente a sus alojamientos y lugares de entrenamiento y competición, además de atenerse a reglas como el uso de mascarilla o el mantenimiento de distancia social.
Primeros positivos
En el marco del férreo protocolo anticovid ideado por los anfitriones, el pasado domingo se conoció el primer contagio de COVID-19 de un participante extranjero que viajaba a Japón para los Juegos, registrado en un entrenador del equipo de Uganda que aterrizó el día anterior en Tokio y que fue puesto en aislamiento.
Este primer positivo «muestra que las medidas de control son extremadamente estrictas», ya que el miembro del equipo africano se había vacunado en su país y sometido a dos test del virus previos antes de su llegada a Japón, según Hashimoto.
La organización tiene previsto anunciar «de forma inmediata» cada positivo que se detecte en los test diarios a los deportistas e informar de las medidas de seguimiento y testeo que se aplicarán a las personas que hayan mantenido contacto cercano con los infectados.
Controvertida presencia de espectadores
Hashimoto defendió la polémica decisión anunciada el pasado lunes por los organizadores de permitir el acceso de hasta 10,000 espectadores en las gradas de los Juegos, una medida basada en las directrices del Gobierno central y que, sin embargo, va en contra de la opinión de especialistas sanitarios.
«Es cierto que los expertos señalaron que la opción con menos riesgo era celebrar los Juegos sin espectadores, pero también nos recomendaron medidas para poder contar con público y minimizar el riesgo todo lo posible», dijo.
La celebración durante meses de pruebas deportivas con público en Japón, como los partidos de las ligas nacionales de béisbol y fútbol, «demuestra que aplicando medidas extensivas podemos prevenir contagios», señaló Hashimoto.
«Casi no hay posibilidades de que haya contagios en las sedes con las medidas aplicadas», que incluirán limitar el movimiento de los espectadores antes y durante las competiciones, o el uso obligatorio de mascarilla y la prohibición de cantar y animar en voz alta, afirmó la responsable de Tokio 2020.
Los organizadores también se reservan la opción de celebrar pruebas a puerta cerrada en caso de que se declarase un nuevo estado de emergencia.
Por otra parte, y para compensar la ausencia de público venido del exterior debido al veto impuesto por los organizadores por la pandemia, se ha ideado un sistema para que lleguen a Tokio los mensajes de ánimo de espectadores de todo el mundo.
Los mensajes publicados por seguidores de los Juegos a través de las redes sociales serán presentados en pantallas en las sedes de las competiciones, explicó Hashimoto, quien señaló que esta iniciativa tiene el objetivo de «reconectar a la gente de todo el mundo» tras la «división» que ha causado la pandemia.
El legado de Tokio
A juicio de los organizadores, estos Juegos que se verán simplificados en muchos aspectos organizativos y de número de participantes a raíz de la pandemia pueden suponer «una oportunidad de cambio» para que las citas olímpicas «cambien su formato y se centren en su esencia».
Hashimoto, no obstante, admitió que los anfitriones nipones «no han tenido éxito» a la hora de transmitir su mensaje a la ciudadanía japonesa, que se ha mostrado desfavorable a la celebración de los Juegos en las fechas previstas, según diversas encuestas.
Por otra parte, consideró que Tokio 2020 puede ser el escaparate para que Japón muestre al mundo «su capacidad para ofrecer soluciones a problemas globales» como la pandemia.
«Queremos que el legado de los Juegos sea nuestra cultura de la hospitalidad y del espíritu de cuidar unos de otros y de preocuparnos por la salud de los demás», afirmó. (ag)