Tegucigalpa – Los hallazgos de extensas plantaciones de coca y marihuana en Honduras se han visto incrementadas en los últimos dos años, con el común denominador de escasas o nulas capturas como los responsables de estas extendidas siembras ilícitas.
+ Desde sectores montañosos, pasando por predios privados y tierras ejidales, hasta en reservas naturales protegidas por el Estado, son territorios preferidos por las organizaciones criminales para la siembra de estas plantaciones ilegales.
+ En contraste con la subida en el hallazgo de plantaciones de coca, ha bajado dramáticamente la destrucción de narcopistas y narcoavionetas.
+ Mientras el decomiso de cocaína que en 2023 bajó un 93 % (menos de una tonelada), este año ya se registran más de cinco toneladas del polvo blanco.
Día a día la información oficial difundida por portavoces de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional, así como por la Fiscalía hondureña confirma que los cultivos ilícitos son una especie de moneda de curso legal en este país ubicado en el corazón de Centro América.
Un hecho peculiar ocurrió mientras se desarrollaba en la Corte del Distrito Sur de New York, EEUU, el juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández, declarado culpable por tres delitos de narcotráfico.
Desde el 21 de febrero cuando el juicio inició, bajo la tutela del juez Kevin Castel, hasta el viernes 8 de marzo de 2024, 804 mil 181 plantas de coca fueron aseguradas en operativos realizados por las fuerzas del orden. También se decomisaron más de 142 mil plantas de marihuana en el mismo periodo.
En esas casi tres semanas, las capturas tras los hallazgos fueron casi inexistentes, igual que ha ocurrido tradicionalmente ya que, aunque las extensiones de cultivos de coca, marihuana y otras drogas son extensos, los responsables siempre resultan figuras fugaces y con suerte, únicamente los cuidadores de los sembradíos o de los narcos laboratorios son detenidos.
Los reportes oficiales apuntan que para 2017, cuando trascendieron los primeros descubrimientos de sembradíos, Honduras ya tenía al menos una década de haber incursionado en este mundo a manera de experimento en los inicios del siglo XXI. El Ministerio Público confirmó el hallazgo en el municipio de Esquipulas del Norte, departamento de Olancho.
Los datos oficiales dan cuenta que en 2017 en Honduras se registró el hallazgo de 12 mil plantas de coca, 112 mil en 2018, 40 mil en 2019, 424 mil 900 en 2020 (año pandemia), 531 mil 836 en 2021, 6 millones 550 mil en 2022 y casi 7 millones en 2023. Se prevé que este 2024 se imponga una cifra récord de hallazgos de estos cultivos, ya que los recuentos oficiales suman más de 5 millones de arbustos.
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Específicamente las plantaciones de coca se han cultivado en los municipios de Iriona, Limón, Sonaguera y Bonito Oriental en Colón; Olanchito y Yoro, en Yoro; Gualaco, Esquipulas del Norte, Dulce Nombre de Culmí, Patuca, Catacamas, en Olancho; Juan Francisco Bulnes, en Gracias a Dios; Trojes, en El Paraíso; San Antonio, en Cortés; La Masica, La Ceiba, en Atlántida; y Trinidad y Azacualpa en Santa Bárbara.
Una autoridad antidrogas consultada por Proceso Digital dijo que existe preocupación porque aunque los golpes han sido certeros, los hallazgos de plantaciones no paran. “El año pasado fueron muchísimas las erradicaciones y esperábamos que este año bajaran, e incluso poder declarar al país libre de estos cultivos ilícitos”, reforzó.
Se preguntó: por qué si se destruyen extensas hectáreas de cultivos de coca, a qué se atiene el país. “Parece que jugamos al gato y al ratón, los corremos de un lado y se van a cultivar a otro, eso no ha parado”, afianzó.
Además, citó que se produce un daño ambiental incalculable y hasta catastrófico por los efectos del cambio climático. “Los lugares donde se efectúan estas plantaciones quedan contaminadas con tanto químico que se usa en los cultivos. Llevará al país muchos años para recuperar la selva virgen y los recursos naturales”, apuntó.
Puntualizó que actualmente también existe doble preocupación porque se han incrementado con creces las incautaciones del clorhidrato de cocaína que viene desde el sur del continente.
Cárteles “sin cabezas” detrás de plantaciones
Pese a que muchos de los capos hondureños ya fueron extraditados e incluso condenados por la justicia de Estados Unidos, estas organizaciones con mandos intermedios siguen vigentes en el mundo de la narcoactividad.
Las propias versiones del Ministerio Público señalan que estas estructuras del hampa están detrás de las vastas plantaciones de coca y de marihuana en el que constituye el corredor del narcotráfico en el Caribe y oriente de Honduras.
Las mismas investigaciones oficiales señalan que detrás de las plantaciones de coca en extensas zonas de Colón estaría el cartel Montes Bobadilla, de quienes varios de sus cabecillas han sido entregados y juzgados por la justicia norteamericana.
El único de este clan que permanece prófugo es Juan Carlos Montes Bobadilla y quien comanda las operaciones desde la clandestinidad. En abril pasado se informó de una plantación de coca en Limón, Colón, en una propiedad de este jefe del hampa.
(LEER) Los Montes Bobadilla, de temidos transportistas de drogas a cultivadores de coca
Fuentes de la Fiscalía consultadas por Proceso Digital también responsabilizan de estas plantaciones ilegales al Cartel del Norte, Los Piningos, Los Elvir, Los Aragón y Los Amador, así como operadores o residuos de capos extraditados como Fredy Mármol, Los Rivera Maradiaga (Los Cachiros) y ligados a Wilter Blanco.
La fuente señaló que José Luis Oliva Meza, alias «El Señor de los Cielos», el extraditado número 33 a EEUU, era el responsable de extensas plantaciones localizadas en Colón.
Además, refirió que existe un descontrol detrás de químicos empleados para la transformación de esta planta, lo que ha dado paso a la proliferación de narcolaboratorios.
En los últimos años, las plantaciones de coca son más visibles en el departamento de Olancho, que desbancó a Colón en ese tipo de siembras ilícitas y actualmente esa extensión de los cultivos hace que Honduras reciba el nada honroso título de país industrial de coca.
Los parques nacionales se han convertido en blanco de los criminales. Ya son varios los hallazgos de plantíos en estos sitios, como el ubicado en 2021 en las cercanías de la Reserva Forestal de Pico Bonito y Arenal.
A inicios del 2023, fuentes del instituto castrense hondureño informaron a Proceso Digital que la operación en el sector montañoso entre el Parque Nacional de Pico Bonito y el refugio de vida silvestre Texiguat, al sur del municipio de La Masica, Atlántida.
Previamente, en 2022 se informó de una nueva erradicación y destrucción de arbustos de hoja de coca, en una zona conocida como El Antigual, departamento de Colón y colindante con la biósfera del Río Plátano, afectando la reserva natural.
Sólo de abril de este año
++24.04.2024.
Erradican 72 mil arbustos de coca en Colón
++23.04.2024.
Hallan 25 mil plántulas de coca en San Francisco de Locomapa, Yoro
++22.04.2024.
Hallan 15 mil plántulas de coca en Olanchito, Yoro
++22.04.2024.
Aseguran plantación de coca y narcolaboratorio en La Masica, Atlántida
++16.04.2024.
Aseguran 72 mil arbustos de coca y laboratorio rústico en Colón
++15.04.2024.
Aseguran plantación de 1,500 arbustos de hoja de coca, en Olancho
++14.04.2024.
Aseguran plantación con 16 mil arbustos de marihuana en Colón
++10.04.2024.
Aseguran 95 mil plantas de coca en Olancho
++08.04.2024.
Erradican más de ocho mil plantas de marihuana en reserva biológica El Chile en Cantarranas
++06.04.2024.
En propiedad de Juan Carlos Montes Bobadilla, aseguran plantación de coca
++02.04.2024.
En primer trimestre de 2024, FFAA erradica 3 millones de arbustos de coca y decomisa 1,300 kilos de cocaína
