El anteproyecto nace como una iniciativa de la secretaría de Justicia y Derechos Humanos y contó con el apoyo de representantes de la Asociación Nacional de Sordos, Federación Nacional de Padres de Personas con Discapacidad y diferentes instituciones y organismos de sociedad civil que trabajan la temática de la discapacidad.

Durante un conversatorio, efectuado este martes, los niños, niñas y jóvenes solicitaron al presidente hondureño el apoyo para la reapertura de la carrera de intérprete de lengua de señas en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y la aprobación de la Ley de la Lengua de Señas de Honduras.

Con la implementación de la Ley se espera que las instituciones centralizadas, descentralizadas, desconcentradas y demás órganos de la administración pública, así como las corporaciones municipales promuevan políticas, planes, programas, y estrategias para la aplicación de la Ley y la difusión de los derechos de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordo ciegas.

Por consiguiente, se establece que en los actos oficiales o públicos, participen intérpretes de la lengua de señas para asegurar el acceso a la información y comunicación de los beneficiarios, así como la participación de intérpretes oyentes para promover la divulgación de información de los miembros de este sector a la sociedad hondureña en general.

Asimismo, se propone que los propietarios de los medios de comunicación audiovisuales utilicen en la transmisión de todos los programas intérpretes de la lengua de señas para mantener informadas a las personas sordas y con discapacidad auditiva.

También se espera que la secretaría de Educación capacite en el sistema lingüístico de señas al personal administrativo y docentes de los centros educativos públicos y privados que atienden a personas sordas y con discapacidad auditiva y que el lenguaje de señas sea utilizado en el proceso de enseñanza-aprendizaje e interlocución con dichas personas.

El anteproyecto gestiona el acceso igualitario a la justicia, a través de la Corte Suprema de Justicia, quien garantizará que en el desarrollo de todo proceso judicial, las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordo ciega puedan contar con la asistencia de un intérprete de lengua de señas que le facilite la comunicación en sus comparecencias ante las instancias o autoridades judiciales, como medio efectivo para lograr un pleno e igualitario acceso a la justicia.

Largas jornadas de trabajo

La ministra de DDHH, Ana Pineda, señaló que para llegar a este punto la institución que ella rectora realizó largas jornadas de trabajo para promover los derechos de las personas con discapacidad, proceso que culminará con la aprobación de la Primera Ley de Lengua de Señas de Honduras que vendrá a suplir la necesidad de esta población.

Por su parte, el gobernante Porfirio Lobo destacó la importancia de esta Ley que representa el deber de una sociedad y un gobierno comprometido con la justicia y la solidaridad, por lo que dijo que esta iniciativa de ley es el reconocimiento a los Derechos Humanos que tiene este sector de la población.

En el conversatorio participaron la Asociación de Sordos de Honduras con representantes de San Pedro Sula, Juticalpa, El Progreso, Siguatepeque y Tegucigalpa; Fundación Hondureña de Rehabilitación e Integración del Limitado (FUHRIL), Federación Nacional de Organismos de Personas con Discapacidad de Honduras, Grupo Hondureño de Apoyo a Personas Sordas, Asociación de Apoyo al Autista APO-AUTIS , el Programa de Servicios para Estudiantes con Necesidades Especiales, Federación Nacional de padres de personas con discapacidad de Honduras, Red de Mujeres con Discapacidad de Honduras, Fundación Casa Ayuda de Comayagua, Centro de Capacitación Especial, Instituto Juana Lecrerc, Escuela Nacional de Música y Centros educativos y jardines para niños sordos.