Tegucigalpa – El poderoso fusil de origen ruso AK-47 y la pistola calibre nueve milímetros son los tipos de armas que más se usan para cometer homicidios en Honduras, según coinciden analistas en criminología.
-En un reciente enfrentamiento entre pandilleros y la Policía en Amarateca, un menor de 14 años fue abatido y junto al cuerpo quedó el letal fusil AK-47 que portaba.
-El criminólogo Nery Ordóñez cree que los narcotraficantes están pagando con armas de las FARC a las estructuras criminales en Honduras, la Policía lo rechaza.
-El fundador de Inspecciones Oculares, Gonzalo Sánchez, asegura que el 80 por ciento de los homicidios en Honduras se ejecutan con un arma de fuego, generalmente automática.
Gonzalo Sánchez Uno de esos expertos es el abogado y criminólogo Gonzalo Sánchez quien manifiesta que haber aprobado una nueva Ley de Control de Armas de Fuego, Municiones, Explosivos y Materiales Relacionados, no ha servido para reducir el número de homicidios en el país ya que “solamente se le agregaron algunas cositas que no tenía la anterior ley”.
Las más recientes estadísticas proporcionadas por la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), entre 2014 y lo que va de 2019, destaca el decomiso de 15 mil 197 armas de fuego; 207 mil 822 municiones de todo calibre y 87 granadas de fragmentación.
Armas no registradas
“En cuanto a que esa nueva ley va a bajar los índices de criminalidad, eso no es cierto y no es cierto por una sencilla razón, porque los crímenes se cometen con armas que no están registradas, entonces esto es un círculo vicioso, las personas honradas van a registrar sus armas y las armas ilegales siempre van a continuar circulando en el país, y siempre van a ser las armas que se van a utilizar para darle muerte a las personas”, aseveró.
Acotó que no es la ley la que va a frenar la ola de criminalidad, aunque hay un control y hay unos exámenes que se van a hacer de tipo sicológico, sicométrico, toxicológico y eso está bien para establecer a quién se le va a dar un permiso de portación de armas, pero eso no es disuasivo para que los delincuentes utilicen armas no registradas.
Sánchez apunta que es sumamente difícil poder controlar la circulación de armas ilegales, aunque los operativos y las saturaciones que realiza la Policía de alguna manera son disuasivos y para el caso citó lo ocurrido durante la temporada navideña del año pasado cuando salieron todas las unidades de la Policía Nacional, incluyendo el comando Tigres, la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), la Policía Militar e incluso de las Fuerzas Armadas para brindar seguridad en las principales ciudades del país y fue cuando las estadísticas de los crímenes se fueron “casi al suelo” y sólo regresaron en enero a sus labores habituales y comenzaron las masacres.
Los operativos solamente son de prevención pues no van a pasar en la calle el Ejército, la Policía Militar, los Tigres y Fusina los 365 días del año, acotó.
Principal instrumento de muerte
El especialista quien dirigió el registro balístico en Honduras, apuntó que según los estudios que se han hecho, “más del 80 por ciento de los asesinatos que se cometen en Honduras, son por medio de arma de fuego, convirtiéndose en el principal instrumento de muerte en el país.
“El fenómeno armas de fuego continúa causando la muerte a las personas porque es difícil controlar, imagínese que los delincuentes utilizan fusiles AK-47, la semana pasada se enfrentaron con miembros de la Policía en una colonia de Amarateca y un menor que murió abatido andaba un AK-47 y así en otros crímenes utilizan fusiles AR-15 y AK-47 que los andan en los vehículos, lo mismo que armas automáticas”, refirió Sánchez.
Considera que la pena que se impone por portación ilegal de armas no se muy grave, de tres a seis años de prisión, pero si se impusiera una pena más alta como sucede en otros países donde son penas hasta de 15 años, eso podría disuadir un poco.
Le da la razón al presidente Juan Orlando Hernández, cuando dice que se necesitan más policías, no militares, sino policías que den más seguridad para hacer más operativos y saturaciones para disuadir el crimen y decomisar las armas no registradas.
El Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), destacó que el 2017 se registraron 3861 muertes violentas y el 2018 esa cifra fue de 3,733 los asesinatos violentos.
Contrabando incontrolable
Sánchez recalcó que el contrabando de armas siempre se va a dar por más que se busquen mecanismos de control en los puntos ciegos en las fronteras, siempre ingresan armas de todo tipo y hasta en contenedores procedentes de Estados Unidos vienen armas de contrabando.
Aclaró que este no es un problema exclusivo de Honduras, sino que sucede en países como México, El Salvador y Guatemala, en Nicaragua, el presidente Daniel Ortega fue vivo porque después de la revolución desarmó a medio mundo.
Las armas sin registro andan circulando en el país a tal grado que ingresan hasta los penales de máxima seguridad donde se supone que hay tecnología como el “body scan” que son máquinas de rayos X, entran esos artefactos a esas cárceles porque los delincuentes se las ingenian con el contubernio y la participación de los empleados penitenciarios.
Características del arma
Nery OrdóñezDe su lado, el también criminólogo Nery Ordóñez, refiere que la nueva Ley de Portación de Armas, sirve para establecer si un proyectil que ha sido disparado tiene la misma similitud que el que se encuentra en los depósitos de las unidades donde se ha recolectado o se ha matriculado un arma.
Ejemplificó que, si un arma ha participado en una masacre, los casquillos que se encuentran en la escena son llevados por Inspecciones Oculares y entregados a un programa que tiene la Policía que se llama sistema de análisis Abis Pak que lo que permite es buscar las características del arma.
Aseguró que, en muchos casos, ese sistema ha establecido que existe vinculación entre el arma con el crimen o si esa arma fue robada o posiblemente mataron a una persona y le robaron el arma o si son armas que nunca han sido matriculados. Hay casos donde se sabe qué arma participó, pero como hay un proceso científico para identificar quién fue el que haló el gatillo, son las huellas digitales las que servirán para dar con el culpable a través del cotejo dactilar en los registros que tiene la Policía o en su defecto hacer las comparaciones con las huellas digitales que tiene el Registro Nacional de las Personas (RNP).
El Ak-47 el favorito
Ordóñez refirió que en la mayoría de los crímenes se utilizan armas automáticas, principalmente los fusiles AK-47 de origen ruso y el AR-15 de fabricación estadounidense que le da el impulso del disparo cambiando el selector ráfaga en ráfaga.
No obstante, el arma favorita para cometer los crímenes, porque se ha comprobado que incluso penetran algún tipo de blindaje o que puede alcanzar rápido los objetivos, es el fusil AK-47, después vienen otro tipo de armas automáticas como las pistolas calibre nueve milímetros y también figuran las armas artesanales o “chimbas” que son fáciles de fabricar y que circulan en lugares rurales donde las tienen para protegerse.
Detalló que, según estimaciones, del 100 por ciento de armas que hay en el país, solamente entre un 30 y 35 por ciento son las que están registradas y el restante 70 o 65 por ciento, son armas clandestinas diseminadas a nivel nacional que están en poder mayormente de estructuras criminales.
Si se observa el mapa de calor donde más crímenes se cometen con armas de fuego en el país son el sector norte, la parte central y el departamento de Olancho y en los puntos fronterizos con Nicaragua y El Salvador donde los integrantes de maras y pandillas tienen un efecto multiplicador para ingresar y sacar armas.
Narcoavionetas con armas
Refirió que una avioneta que recientemente cayó en la costa Atlántica del país, traía droga y también armas pues los narcotraficantes descargan y entregan y pagan con armas.
Denunció que las armas de grueso calibre y de gran alcance que pertenecían a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), se están trayendo a Honduras para armar al crimen organizado.
Esas armas están yendo a parar a estructuras criminales de maras y pandillas que se dedican al narcotráfico y eso se refleja con lo sucedido en un enfrentamiento en la colonia Adra de Amarateca donde un menor de 14 años portaba un fusil AK-47 y con dos cargadores de 30 balas cada uno, el que en una ráfaga en cuestión de un microsegundo se van entre 10 y 15 proyectiles y si viene una patrulla donde vienen todos juntos o un grupo de individuos, pueden morir varias personas.
“Esa es la desproporción que tienen las fuerzas del orden en base a la cantidad de armas que se encuentran a nivel nacional a las armas que están registradas”, refirió Ordóñez.
Delito transnacional
Jair MezaSin embargo, consultado sobre la versión que armas de las FARC que estarían ingresando al país en las mismas narcoavionetas que aterrizan en el país, el portavoz de la Secretaría de Seguridad, comisionado de policía, Jair Meza, rechazó que eso esté aconteciendo.
Aseguró que en las avionetas que se han encontrado lo que se ha comprobado que viene es cocaína y si bien se han hallado algunas armas pertenecen a los pilotos.
Meza aseguró que las operaciones para decomisar armas sin registrarse continúan cotidianamente y las que se incautan por no contar con el permiso se envían a los tribunales y a los que las portan con un permiso vencido se les imponen sanciones fuertes que implica varios salarios mínimos.
Admitió que el tráfico de armas es uno de los delitos transnacionales más lucrativo, después de la droga, y se ha comprobado que desde Estados Unidos siempre ingresan armas que son compradas allá de manera legal, pero que ingresan al país de forma ilegal y que llegan en contenedores.
Indicó que mediante la Ley de Portación de Armas solamente se pueden registrar las armas que son compradas en La Armería y si hay un arma que no ha sido adquirida en ese establecimiento, no pueden ser registrada y eso ha incentivado el contrabando de armas desde Estados Unidos haya bajado bastante.
Refirió que el fusil AK-47 es un arma de guerra de libre circulación en Nicaragua que está muy cerca lo que permite que estructuras criminales puedan tener acceso a ese tipo de armas y que puedan ser utilizadas para cometer actos delictivos dentro del país.
En ese sentido, las armas automáticas que más se decomisan son los fusiles AK-47 y las pistolas calibre nueve milímetros. También hay armas escondidas de ese tipo y que al ser encontradas son utilizadas por el crimen organizado.
Finalmente, Meza aseguró que las armas que son decomisadas son destruidas a través de un protocolo del Ministerio Público y la Secretaría de Seguridad, lo que se hace públicamente para que las personas puedan observar para lo cual se utilizan máquinas especiales y se cuenta con el apoyo de Estados Unidos.
Mundo de las armas
Según el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), el 76 por ciento de los homicidios son cometidos con armas de fuego, a pesar de la nueva Ley de Portación de Armas.
El organismo reveló que en la actualidad cada ocho horas una persona es asesinada con arma de fuego en Honduras,
San Pedro Sula, Choloma, Francisco Morazán, Yoro, Copán y Atlántida, son las ciudades con más muertes violentas con armas de fuego, según el OV-UNAH.
Con el propósito de disuadir los homicidios, el Congreso Nacional aprobó el año pasado la Ley de Control de Armas, Municiones, Explosivos y Materiales Relacionados, tras de 10 años en proyecto. Su vigencia comenzó a partir de abril de este año.
Según el Observatorio de la Violencia, con la nueva Ley de Control de Armas se podría disminuir entre un tres a 10 por ciento la criminalidad.
Se calcula que un millón 200 mil armas de fuego de origen ilícito circulan en el territorio hondureño y solo un promedio de 600 mil de ellas se encuentran registradas en el registro balístico.
Los fusiles AK-47, subametralladora Uzi y mini Uzi, son las armas que las personas no pueden tener ni portar en Honduras.
