«Este evento de toma de posesión como presidente de la Asamblea Legislativa de El Salvador refleja, sin duda alguna, la madurez cívica y democrática que ha alcanzado la sociedad salvadoreña», afirmó Reyes en una sesión especial del Parlamento, que recibió su discurso con una ovación y el grito de «sí se pudo».
Reyes se convirtió en el primer presidente de la Asamblea por el FMLN, que en 2009 se estrenó como partido de Gobierno y que accedió al poder tras el triunfo electoral del actual mandatario, Mauricio Funes, quien, a diferencia del nuevo titular del Legislativo, no es un militante histórico de este grupo político.
«La transición que este día tiene lugar en este órgano fundamental del Estado no es simplemente el cambio de un presidente por otro, es, en una perspectiva más profunda, un paso más, por cierto muy significativo, en la gran transición a la democracia que se inauguró para El Salvador con la firma de los acuerdos de paz», destacó el flamante presidente del Parlamento.
Aludió así a los acuerdos que se firmaron el 16 de enero de 1992 entre la entonces guerrilla del FMLN y el Gobierno, y que pusieron fin a una guerra civil de 12 años que dejó al menos 75.000 muertos.
Reyes dedicó su nuevo cargo, entre otros, al asesinado arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero, al histórico líder de izquierda Schafick Handal y a Farabundo Martí -de quien heredó el nombre su partido-, al recordar que hoy se cumplen 79 años de su fusilamiento.
Sobre su gestión, que concluye el 30 de abril de 2012, aseguró que la agenda legislativa es «extensa y compleja».
«El Salvador vive un momento inédito de su historia, grandes cambios se han iniciado, pero desafíos enormes nos aguardan y amenazas de dimensiones preocupantes se ciernen sobre el presente y futuro del país. El quehacer de la Asamblea Legislativa no puede estar al margen de esta realidad nacional e internacional», añadió.
Prometió que trabajará con todos los grupos parlamentarios, con Funes y su gabinete para «dotar al país de una legislación moderna y a la altura de sus necesidades».
Urgió a que el país se adhiera «sin más dilación» a la Corte Penal Internacional y que ratifique el protocolo facultativo del pacto internacional de derechos económicos, sociales y culturales, a la vez que anticipó que impulsará leyes como la de medicamentos, de reordenamiento territorial y para los salvadoreños en el exterior.
Reyes asumió como titular de la Asamblea tras un acuerdo alcanzado el 31 de octubre de 2009, que cambió la composición de la directiva legislativa con la incorporación de diputados del ahora partido Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), que surgió de una escisión de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA, derecha).
El acuerdo incluyó dividir el período de la Presidencia Legislativa, hasta este día en manos de Ciro Cruz Zepeda, del Partido de Conciliación Nacional (PCN), quien cedió su mandato para darle paso a Reyes durante 15 meses.
El diputado Nelson Guardado, jefe de fracción de GANA, dijo a Efe que espera que durante la gestión de Reyes se imponga el diálogo, la transparencia y que sea cercano a la gente.
A su vez, Norma Guevara, del FMLN, aseguró que apuestan a una «mayor apertura, una mayor comunicación con la ciudadanía» e indicó que el FMLN en la presidencia de la Asamblea está «gobernando en nombre del pueblo y para el pueblo».
La diputada Mariela Peña, de ARENA, señaló que esperan que en la nueva directiva exista transparencia y se «saque adelante» esta Asamblea Legislativa.
Sentenció que aunque no votaron por el acuerdo que permitió este cambio en la presidencia, pues su bancada se retiró del plenario, esperan que Reyes tenga una buena gestión.
