San Salvador – La cifra de fallecidos por la enfermedad del COVID-19 en El Salvador se elevó a 25 este viernes con la muerte de dos hombres, mientras que los recuperados sumaron 417, informó el Ministerio de Salud.
Se trata de dos hombres de 74 y 54 años de edad, quienes fueron ingresados en unidades de cuidados intensivos.
«Nuestro más sentido pésame a las familias. Que Dios los reciba a ambos», lamentó el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, en un mensaje en Twitter.
Estas muertes se dan en momentos en los que el Gobierno no cuenta con los respaldos necesarios en el Congreso para ampliar por 15 días más el estado de emergencia y se elevan las tensiones con los empresarios.
El Salvador suma 1,210 contagios y se han realizado más de 51,000 pruebas para detectar al virus, según información oficial.
Las personas recuperadas suman 417 y los casos «activos» son 768, de los que 474 pacientes no presentan síntomas, 198 se encuentran estables, 51 tienen un pronóstico «moderado» y 27 «grave». En estado «crítico» se encuentran 18 personas.
Entre las personas que recibieron el alta, y deben completar un proceso de cuarentena, se encuentra una madre con su dos hijas gemelas y otra mujer de 54 años de edad, mientras que seis personas fueron ingresadas con sospechas de padecer la enfermedad.
«Lo más importante es no ser parte de estas estadísticas», dijo el ministro de Salud, Francisco Alabí, a periodistas tras dar el alta a la mujer de 54 años de edad.
Los principales partidos de oposición se han mostrado contrarios a ampliar de forma automática la vigencia del estado de emergencia, que vence el 16 de mayo, sin que el Ejecutivo de Bukele presente los informes sobre el manejo de la pandemia.
Por otra parte, la tensión entre el Gobierno y los empresarios se elevó este viernes tras el cierre de una fábrica textil, que se encontraba confeccionado mascarillas y trajes de protección para médicos.
El presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Javier Simán, señaló que la fábrica fue cerrada por policías y militares, quienes dijeron que obedecían órdenes «de más arriba» y sin dar otros motivos.
Bukele dijo el pasado 12 de mayo que no reconoce el liderazgo de Simán al frente de la ANEP, que reúne 14,000 empresas.
