Tegucigalpa – Durante el 2022, año a punto de culminar, Honduras experimentó el mayor repunte del delito de extorsión, al punto que casi ningún rubro o sector se vio fuera de los tentáculos de este delito que lejos de desaparecer, expandió su crecimiento hasta obligar al gobierno a declarar un estado de excepción con suspensión de garantías constitucionales como parte de la guerra frontal para frenar dicho crecimiento exponencial.
– La extorsión es un delito atribuido auténticamente a las pandillas, pero las actuales autoridades creen que el crimen organizado está detrás del flagelo, incluso, dicen que personas que no tienen nada que ver con esas organizaciones criminales, se lucran del negocio.
Hugo López, un socio fundador de un restaurante en Lago de Yojoa, compartió con Proceso Digital su testimonio sobre este flagelo. Al igual que muchos, su experiencia inició al recibir una llamada por parte de miembros del crimen organizado realizando el cobro extorsivo a cambio de dejar operar su negocio y ofrecer cierta protección frente a grupos rivales.
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Fueron necesarias tres llamadas extorsivas para que este hondureño decidiera acudir a las autoridades pertinentes y denunciar este delito.
López compartió que cree que personas residentes en la zona están coludidas con los grupos criminales.
Redes sociales
En su experiencia, López narró que fue a través de las redes sociales como los grupos criminales obtuvieron su información, precisamente su número telefónico al que se realizaron las llamadas extorsivas.
No obstante, no descartó la colusión de personas residentes en la zona, en este caso en Lago de Yojoa, con los grupos criminales.
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“No descarto incluso que sean personas dentro del mismo sector del emprendimiento y hasta las mismas autoridades”, apuntó.
El cobro que a él le exigieron fue de 3 mil lempiras mensuales, sin embargo, la cuota puede variar según sea el rubro.
Si no se paga, la respuesta es la muerte
Aunque los grupos extorsivos inician ofreciendo protección de rivales, al final si no se realiza el pago, la respuesta es la muerte, comentó.
El mecanismo para realizar el pago, es que ellos mandan a alguien personalmente para recoger el dinero, narró.
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Sin embargo, los mecanismos pueden ser tan ingeniosos como colores hay en el mundo, ya que a causa de la lucha frontal contra el delito deben renovar sus formas de operar.
Este emprendedor exhortó a las autoridades a realizar mayores acciones de investigación y aplicar castigos reales.
Penas severas
Como una de las miles de víctimas de este delito, López pidió penas severas para los criminales que realizan cobros extorsivos.
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“Queremos que se apliquen castigos reales, no mandarlos a dormir horas a una cárcel bien cuidados y con comida”, apostilló.
“Manos duras para estos delincuentes”, continuó al tiempo que razonó que se deben endurecer las penas ya que las propias autoridades pueden estar detrás de este delito.
Guerra contra la extorsión
La presidenta Xiomara Castro, recientemente echó mano de retórica bastante agresiva para declarar al Estado en guerra contra la extorsión, una estrategia que data de 2013 en el periodo presidencial de Porfirio Lobo Sosa, una política que siguió el también nacionalista Juan Orlando Hernández (extraditado a EEUU) y que la actual administración, cambió su nombre pasó de ser FNAMP la Dirección Policial Anti Maras y Padillas Contra el Crimen Organizado (Dipampco).
Después de eso el nuevo gobierno, tardó cinco meses para lanzar su plan contra la extorsión, en un contexto en que la delincuencia, criminalidad y secuestros, manifiestan su músculo más fuerte en una Honduras con frágil institucionalidad, golpeada por los fenómenos naturales, la pobreza, migración y la corrupción, que además, es estigmatizada por los premeditados y extensos vínculos con el narcotráfico, cuyas acusaciones recaen en la clase política nacional.
Castro dijo que pretende controlar el desmedido y lucrativo comercio existente en la venta de chips para celulares, ya que esa herramienta en manos de criminales se utiliza para extorsionar en el país, subrayó que en esa guerra contra ese ilícito, caerán bandidos de cuello blanco; por su parte el director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, dijo que la política anterior fracasó y aseguró que jueces, políticos, empresarios y transportistas, estarían detrás de la extorsión. (RO)