Tegucigalpa – El empresario del transporte, Jorge Lanza, cuestionó que las autoridades puedan intervenir los teléfonos de quienes trabajan en el rubro, pero no de los extorsionadores.
“Para tenerlo vigilado a uno sí existe eso (intervención), pero no para tener vigilado a los delincuentes, a los que llaman desde las cárceles para extorsionarnos”, explicó Lanza a periodistas.
Cómo es posible si han puesto cercos y barreras para que no salgan llamadas, se preguntó el dirigente de transporte ante la ola de extorsiones que los abaten.
Reveló que en ocasiones los extorsionadores les hacen cobros utilizando documentación de personas que ya fallecieron o de quienes perdieron sus cédulas.
Lanza manifestó que el sector transporte ha pedido hasta la saciedad a las compañías telefónicas de que deben de tener un control completo de quienes portan un chip.
Por otro lado, criticó que la Secretaría de Seguridad no reciba los fondos prometidos de la Tasa de Seguridad, mencionando el caso de la Dirección Policial Anti Maras y Padillas Contra el Crimen Organizado (Dipampco), encargados de combatir la extorsión.
Ellos apenas están arañando porque no tienen carros ni combustibles, reclamó.
Lanza mencionó que el problema de la extorsión abarca hasta cualquier emprendedor que se dedique a vender porque ya pagan impuesto de guerra.
Al sector lo tienen de caballito de batalla cada vez que se le antoja pedir más dinero van donde nosotros, nos deja un teléfono y ya no hay de donde dar
“Nosotros no tenemos más dinero, hay empresas que están paradas, en Tegucigalpa tenemos unidades que no están trabajando como la ruta de la Kennedy o Cerro Grande”, expuso. AG