Tegucigalpa – Ante los señalamientos formulados por el Tribunal Superior de Cuentas (TSC), órgano que remitió al Ministerio Público (MP), un informe que evidencia indicios de responsabilidad penal en la compra de zapatos para niños a un monto de 7.7 millones de lempiras, asignados al Programa de Asignación Familiar (Praf), como una solicitud del Despacho de la Primera Dama, del anterior gobierno, ella negó responsabilidad alguna en el caso.
En un comunicado divulgado la noche de este jueves, la ex primera dama, Rosa Elena Bonilla indica que los señalamientos formulados por el TSC, “son infundados en contra de un noble programa que benefició a miles y miles de niños y niñas de las Escuelas Públicas de Honduras”.
Frente a la versión del ente contralor, cuyo expediente se registra bajo el número 004-2013-DASS-PRAF-B, se desprende de una auditoría financiera de cumplimiento legal practicada al Praf, correspondiente al período comprendido del 01 de enero del 2010 al 31 de diciembre de 2012, que constató hallazgos de varias irregularidades, según el TSC.
Ante la denuncia oficializada por el TSC, la ex primera dama Rosa Elena Bonilla indica en un comunicado especial lo siguiente:
1. En mi desempeño como Primera Dama de la Nación, impulsé el Programa Calzando los Niños de Honduras para dotar a miles de humildes infantes con un calzado digno. La sonrisa de cada niño y niña que recibió un par de zapatos será siempre una de las satisfacciones más grandes que tendré.
2. El cargo de la Primera Dama tiene un rol eminentemente social, no es funcionaria pública, no tiene bajo su responsabilidad la administración de fondos públicos y el Despacho como tal no tiene asignada ni administra ninguna estructura presupuestaria. Legal y administrativamente correspondió al Programa de Asignación Familiar, PRAF, la administración de este programa.
3. Mi función como Primera Dama fue la de entregar como así lo hice, miles de zapatos a las niñas y a los niños de las Escuelas Públicas en barrios, colonias y aldeas de todo el país.
4. El Tribunal Superior de Cuentas perfectamente sabe que el Despacho de la Primera Dama no fue quien administró este programa, sino que el mismo fue administrado bajo la responsabilidad administrativa del Programa de Asignación Familiar PRAF. Ojalá que esto, no sea una maliciosa y tendenciosa forma de dañar mi persona, a mi familia, así como al exitoso programa. Si así fuera que Dios sane sus almas.
La auditoría del Tribunal Superior de Cuentas tuvo por objetivo verificar el cumplimiento de la Ley de Contratación del Estado, la Ley Orgánica de Presupuesto, y sus reglamentos; y las Disposiciones Generales del Presupuesto, en la asignación de fondos del Praf para apoyar el Programa Calzando los Niños de Honduras.