Tegucigalpa – El dirigente del sector de transporte, Wilmer Cálix, señaló que la medida del estado de excepción parcial no funcionó porque no hubo acompañamiento del engranaje central a la Policía Nacional para contrarrestar la extorsión.
“La Policía hace sus esfuerzos por prevenir, pero no se da el resultado que el pueblo espera porque no hubo acompañamiento de la Presidencia de la República, Ministerio Público, la Corte Suprema de Justicia, y ni de varias instituciones que no se aglutinaron en el estado de excepción”, declaró Cálix.
Expuso que la Policía Nacional hace lo que puede para frenar o prevenir la extorsión y los ataques en el sector transporte.
Reprochó que la Tasa de Seguridad recaudó 16 mil 900 millones de lempiras en tres años del actual gobierno, más el presupuesto asignado a la Policía Nacional, Ministerio Público y Corte Suprema de Justicia (CSJ), pero que la extorsión siga vigente.
El dirigente lamentó que otro gobierno va a finalizar, y la extorsión en el transporte siga vigente.
Sostuvo que los hondureños y el sector transporte ya no necesitan promesas y nombres de estrategias para acabar con la extorsión.
El sector transporte solicita y necesita que haya un gobierno que erradique o disminuye la extorsión, apuntó.
Cálix condenó que en tres años de gobierno solo hay 192 casos de extorsión en judicialización, de los cuales, solo ha habido 19 sentencias firmes.
Clamó al nuevo gobierno implementar una estrategia de seguridad que traiga paz y deje respirar al sector transporte señalando que los asaltos son el pan de cada día en las unidades. AG









