El ombudsman hondureño expresó que desde los sucesos ocurridos en el país el domingo 28 de junio, sigue vigente la Constitución de la República de 1982; y no ha habido en ningún momento Estado de excepción, porque la única garantía restringida ha sido la de la libertad de locomoción en horas de la noche ( 7:00 p.m., 9:00 p.m., 11:00p.m.) hasta las 5 ó 6 horas de la mañana siguiente.
Recordó que luego del Hábeas Corpus cuya ejecución le fue ordenada al Comisionado por la Sala de lo Constitucional, se hizo efectivo entre el lunes 29 y el martes 30, constató que no encontró ninguna persona detenida ilegalmente por razones políticas, en ninguna de las instalaciones militares inspeccionadas a nivel nacional.
Agregó que las celdas policiales siguen siendo el único lugar para la detención legal ordenada por juez competente o por la captura in fraganti, nunca por un período mayor de 24 horas como lo ordena la ley.
Según el informe, entre el 30 de junio y el 07 de julio de 2009, el personal del CONADEH constató la detención de 1215 personas, de las cuales 856 fueron detenidas por incumplir el toque de queda y 359 por suponerlos responsables de la comisión de otros delitos.
Aclaró que las personas que fueron detenidas por incumplir el toque de queda han sido puestos en libertad horas después de su captura.
Con este informe, el Comisionado de los Derechos Humanos desmiente las declaraciones de Manuel Zelaya Rosales que en sus intervenciones públicas afirma que en Honduras hay centenares de miles de detenidos por razones políticas
Custodio también lamentó la tergiversación maliciosa de los hechos por algunos medios internacionales, que han cubierto los sucesos con una parcialidad maliciosa e intransigente y que parecieran desilusionados porque el pueblo hondureño no ha convertido su destino en el espectáculo sangriento de otros pueblos.