Agregó que él no nombró a Hernández en la embajada, sino que se lo impusieron desde Tegucigalpa.
Según la denuncia de Alfaro Posadas, Hernández no llega a trabajar porque solo pasa tramitando incapacidad laboral injustificada.
Ante esa situación, el embajador dijo que ha decidido no pagarle el salario correspondiente a febrero pasado, «porque no es justo» y que ese dinero lo depositará en la Tesorería General de la República.
El diplomático indicó que en días recientes Hernández lo increpó en la sede de la embajada de Honduras en Panamá y lo tomó del cuello hasta ponerlo contra una pared, aunque no lo golpeó, lo que constituye «una falta muy grave».
Por esa razón tiene prohibido el ingreso a la legación diplomática, subrayó Alfaro Posadas en Tegucigalpa.
Carlos Hernández, según Alfaro Posadas, también habría incurrido en arbitrariedades como empleado en otras embajadas de Honduras en Centroamérica, pero en vez de suspenderlo, lo enviaron a Panamá.
Alfaro Posadas fue nombrado en 2006 embajador en Panamá por el presidente hondureño, Manuel Zelaya, en cumplimiento a una promesa que el gobernante le hizo cuando andaba en campaña política, en 2005.
El ahora embajador trabajaba en un programa de radio y televisión con otro colega suyo, Eduardo Maldonado, quien era su jefe y fue uno de los periodistas que apoyó a Zelaya en su campaña en busca de la presidencia de Honduras, la que ganó en noviembre de 2005.