Tegucigalpa – El problema de las irregularidades en la elección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) pasa por los miembros de la Junta Nominadora, manifestó el ministro de Transparencia, Edmundo Orellana.
“En el caso de la Corte Suprema de Justicia, la historia nos revela que el problema no está en el Congreso Nacional, el problema está en la junta nominadora”, dijo el funcionario.
Puntualizó que en la Junta Nominadora puede estar integrada por un representante del crimen organizado, incluso un capo de la droga y no se le exigen requisitos.
Además, agregó que no hay ninguna exigencia específica para qué criterios van a utilizar para evaluar los factores que determinan la idoneidad de los candidatos.
Orellana afirmó que con un proyecto que está trabajando pretende que la Junta Nominadora este integrada por personal idóneo y que los criterios utilizados sean lo más racional, objetivo e imparcial.
Reforzó que el personal de la Junta Nominadora debe tener la capacidad para identificar cuáles son entre todos los candidatos los mejores para que sean enviados al Congreso Nacional.
Preguntado si es posible para despolitizar la elección de la CSJ, respondió que será difícil porque el Congreso Nacional está integrado por partidos políticos y van a pedir “su tajada”.
“Lo que vamos a lograr es que lo que envíe la Junta Nominadora no va a estar predeterminado a la voluntad y capricho de los partidos, será una selección estricta, objetiva, técnica, científica”, argumentó. AG