Barcelona (España) – El presidente del Parlamento catalán, Roger Torrent, prepara una demanda ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH) para «proteger los derechos» de Carles Puigdemont, prófugo de la Justicia en España, y que pueda someterse a una investidura «efectiva» como presidente de la comunidad autónoma española de Cataluña.
Torrent (ERC, izquierda independentista), además, rechazó hoy que la Mesa del Parlamento (órgano rector de la cámara) tratara este mismo martes una propuesta de reforma legislativa para posibilitar la investidura a distancia de Puigdemont, presentada en solitario por Junts per Catalunya (JxCat, derecha independentista), la coalición independentista que él lidera.
Estas decisiones han hecho aflorar más discrepancias entre los partidos secesionistas catalanes sobre las estrategias para llegar a gobernar esta región española, donde persiste el bloqueo político, más aun cuando los asesores jurídicos del Parlamento regional han dictaminado que aún no corren los plazos para unas eventuales nuevas elecciones autonómicas.
El Tribunal Constitucional (TC) español determinó el 27 de enero pasado que Puigdemont no podría ser elegido a distancia, como pretende, pues permanece en Bélgica huido de la Justicia española.
Por el contrario, debería presentarse en el Parlamento regional, según el TC, y con permiso del Tribunal Supremo, que lo investiga por delitos relacionados con el proceso independentista catalán, que promovió en 2017, cuando era presidente autonómico catalán.
Más tarde, Torrent suspendió ‘sine die’ la sesión parlamentaria de investidura que había convocado para el 30 del mismo mes, a la espera de que el TC resuelva las alegaciones contra la impugnación planteada por el Ejecutivo español contra la candidatura de Puigdemont a presidir de nuevo el gobierno catalán.
Según informó hoy el Parlamento regional, la iniciativa ante el TEDH tiene que presentarse individualmente, por lo que lo hará solo Torrent, aunque éste propondrá a los diputados que lo deseen que interpongan sus respectivas demandas.
Fuentes del entorno de Torrent (que pertenece al partido ERC) indicaron que pedirá al TEDH medidas cautelares para «tutelar los derechos políticos de Puigdemont y garantizar una investidura efectiva».
En concreto, que tutele «el derecho a la participación política de Puigdemont» para posibilitar así que pueda someterse al debate parlamentario y ser elegido, si lo decide la cámara legislativa catalana, donde las fuerzas soberanistas suman mayoría absoluta.
Sin embargo, a JxCat no le ha gustado que Torrent decidiera de manera «arbitraria y unilateral» acudir al Tribunal de Estrasburgo, dijeron hoy varios de sus diputados, pues esto puede «chocar» con la estrategia de defensa de Puigdemont.
Tampoco le ha agradado a la coalición independentista que Torrent haya rechazado que la Mesa del Parlamento debata hoy sobre la propuesta de una reforma legislativa que busca que Puigdemont pueda ser elegido en ausencia.
Torrent justificó por «motivos formales» no incluir en la agenda del día tal propuesta para cambiar la ley catalana de la Presidencia regional ya que JxCat presentó dos escritos «contradictorios», a su juicio, sobre cómo debe tramitarse parlamentariamente.
El líder de ERC (republicanos independentistas de izquierda), Oriol Junqueras -en prisión preventiva por el proceso independentista- ha advertido de que sería inviable ejercer una presidencia «efectiva» desde Bélgica, donde se encuentra Puigdemont, pero JxCat insiste en esta opción.
El Ejecutivo español destituyó el 27 de octubre pasado a todo el gobierno catalán, con Puigdemont y Junqueras a la cabeza, después de que el anterior Parlamento local aprobara un declaración a favor de la independencia unilateral.
El Gobierno también convocó elecciones regionales para el 21 de diciembre, en las que los tres partidos separatistas obtuvieron mayoría absoluta de diputados: JxCat (34), ERC (32) y CUP (4).
Además, el Parlamento catalán presentó hoy sus alegaciones para que el TC desestime la impugnación contra la propuesta de investidura de Puigdemont y queden sin efecto las medidas cautelares para impedir su elección.
Considera la cámara catalana que la impugnación «es arbitraria» pues «se funda en argumentos de carácter hipotético o preventivo».
Sobre la decisión de impedir mientras tanto la investidura a distancia, el Parlamento apunta que el TC «no solo ha incurrido en una clara extralimitación de funciones, sino que también ha usurpado unas funciones que no le son propias».
