spot_img

El matrimonio no es «color de rosa», dice Rosa, primera dama de Honduras

Por:

Compartir esta noticia:

Tegucigalpa – La primera dama de Honduras, Rosa Bonilla, confesó hoy que los 18 años de matrimonio con su esposo, Porfirio Lobo, no han sido «color de rosa», pero que han sabido sobrellevarlos en la convivencia, el respeto y el amor.
 

La esposa del presidente hondureño, Porfirio Lobo, se refirió escuetamente a su matrimonio durante una boda colectiva de 410 parejas que fueron casadas gratis a través de un programa social que impulsa la Alcaldía de Tegucigalpa, conmemorando en agosto el «mes de la familia».

Al referirse a los 18 años de matrimonio con Lobo, Bonilla expresó que «no es fácil la cosa (sic), no son color de rosa, pero la mejor manera de sobrellevar el matrimonio es cuando es de dos y no sólo de uno. La convivencia, el respeto y el amor es de la pareja y ahí se debe edificar».

Un comunicado de la Presidencia añade que la primera dama hondureña -a quien su esposo le dice en ceremonias públicas «Mi Rosa»-, expresó que «hoy es un día muy especial» por las «410 parejas que contraen matrimonió en el mes de la familia».

«Estamos celebrando este evento, me siento muy agradecida que el alcalde (de Tegucigalpa), Ricardo Álvarez, me haya invitado para compartir este momento tan grato, donde están legalizando su estatus y reafirmando ese amor que se tienen», agregó la esposa del gobernante hondureño.

En la misma ceremonia, Bonilla prometió donar diez vestidos de novia e igual cantidad de trajes para caballeros, para aquellas parejas que, después de contraer nupcias hoy por lo civil, lo hagan luego por la iglesia.

La boda religiosa de las diez parejas, según la nota oficial, será transmitida por el estatal Canal 8 de Televisión.

El alcalde de la capital hondureña agradeció el acompañamiento a la boda múltiple de la esposa de su compadre y correligionario Porfirio Lobo, quien en cuestiones de bodas ha de tener más experiencias que confesar, considerando que el matrimonio con su querida Rosa es el segundo.

La ceremonia nupcial colectiva se celebró en la recién remozada Plaza Los Dolores, en el casco histórico de Tegucigalpa, frente a la iglesia católica del mismo nombre.

spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img