Los Cremas del Comunicaciones, que con este triunfo conquistaron el título 27 de su historia, salieron de más a menos al revertir el 0-2 con el que fueron derrotados por el Heredia en el partido de ida del pasado jueves.
Tras empatar la serie y concluir los 90 minutos reglamentarios, los dirigidos por Sopegno forzaron la definición del campeonato en tiempos extras sin poder alterar el marcador, por lo que fue necesario acudir a los penaltis y luego a la muerte súbita.
El partido, que se disputó en el estadio Cementos Progreso, ubicado en el norte del capital guatemalteca, la casa del Comunicaciones, estuvo lleno de emociones y fútbol de alta calidad de parte de los dos equipos.
El Heredia, dirigido por el también argentino Juan Carlos Elías, que llevaba la ventaja del 2-0 obtenido en el partido de ida, y que basó su estrategia en la defensa de su portería, abrió el marcador al minuto 26, con un contundente derechazo del brasileño Anderson Andrade.
Serenos y disciplinados, los Cremas se mantuvieron en la estrategia de ataque diseñada por Sopegno, la cual se empezó a concretar con un doblete de Jose Manuel Contreras, a los 64 y 68 minutos, y se terminó de hacer realidad al empatar la serie 3-3, a apenas cuatro minutos antes de concluir el encuentro, con la anotación del uruguayo Paolo Suárez.
Con el encuentro empatado y sin definición, ambos equipos debieron jugar 30 minutos extras, sin lograr durante ese tiempo hacerse daño, lo cual obligó a definir el campeonato en serie de penaltis.
Tres minutos antes de que concluyeran los tiempos extras, el arquero del Heredia, José Calderón, fue expulsado por doble tarjeta por lo que debió ser sustituido por el delantero Robin Betancourth.
A pesar de su inexperiencia en el arco, Betancourth defendió el honor del Heredia, al atajar dos de los cinco disparos lanzados por los designados por el Comunicaciones desde los once metros.
El portero de los Cremas, Juan José Paredes, hizo lo propio al atajar también tres de los penaltis, con lo que de nuevo se empató la serie, por lo que la misma debió definirse en «muerte súbita».
El puntero del Comunicaciones, Jorge Aparicio, quemó la red del arco defendido por Betancourth al anotar el gol que le otorgó el tricampeonato a su equipo, luego de que Wilfred Velásquez fallara el tiro de penalti que le correspondió al Heredia.
Esta es la segunda ocasión consecutiva en que el Comunicaciones le arrebata al Heredia el sueño de alcanzar su primera copa en el fútbol guatemalteca.
La primera fue en la final del Torneo de Clausura 2013, con el que los Cremas alcanzaron el bicampeonato y su copa número 26.
Este es el cuarto título que Sopegno conquista con el Comunicaciones, el primero lo obtuvo en el torneo de Apertura 2010, y en los de Clausura 2011 y 2013, se hizo con los dos siguientes.
