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Efervescencia política oculta inseguridad y corrupción en Honduras

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Tegucigalpa – Decenas de candidatos presidenciales y sus agitadas agendas han colmado los espacios de la agenda política hondureña.
 

La ciudadanía ya no solo enfrenta el agobio de los gastados discursos de los líderes de tantas corrientes de los cinco partidos tradicionales. Ahora, otros tantos partidos en formación, con sus múltiples vertientes, también inundan a una saturada población que apenas puede con la cruz de los altos costos de los alimentos, el desempleo, una corrupción evidente y, peor aún, con la vida vendida en cada espacio público en el que con temores transita.

Pero la agenda política nunca está ausente en la vida cotidiana hondureña. Desde el primer día en que un gobernante asume sus funciones ya la clase política está pensando en el presidente por venir, al punto que en algunos casos, como le ocurrió al ex presidente José Azcona, en su toma de posesión, los seguidores del entonces titular del Congreso Nacional, Carlos Montoya, llevaron al evento una manta lanzándolo a la candidatura presidencial.

Actualmente los hondureños ven la temprana actividad de decenas de precandidatos presidenciales. El tema proselitista parece tomar fuerza en la agenda periodística, que ya lo coloca al par y hasta por encima de problemas reales del país.

Los lanzamientos, los intentos de unidad partidaria, las denuncias de trampas políticas, las traiciones, y deslealtades, las grandes concentraciones y movilizaciones, las alianzas , los candidatos, sus planillas, los líderes y lo que hacen, lo que comen, lo que no hacen y en fin , cada detalle político, han pasado a ser espacios obligados y destacados.

Con menos intensidad se recuerda la depuración policial y cada viernes las nuevas alzas de los combustibles vuelven a despertar las alarmas que ya para el siguiente martes se han vuelto a silenciar.

Y los últimos escándalos públicos como los “arrozazos” en sus tres capítulos; el gasolinazo, la compra energética de 100 megas entre otros han quedado sólo en sendas planas olvidadas.

Pese a la crisis política que se generó en junio de 2009, el tema electoral apasiona tanto a los hondureños que acapara la atención mediática de una población sumida en incontables problemas de orden social y económico.

Y aunque será hasta en mayo próximo cuando se convoque al proceso electoral interno, desde ya el año electoral es un factor determinante para que la atención de la población se centre en cuestiones eminentemente políticas.

Cada día un protagonista político y sus circunstancias colman las noticias.

Así, la actividad de la agenda informativa de los dos últimos días se desbordó en titulares como:

“Nacionalista denuncia que hay “cacería azul”; “Persecución política contra Miguel Pastor afectaría al Partido Nacional, según analistas; “Según analista, el mensaje de Miguel iba dirigido al presidente del Congreso”.

Otros reportan que “En la Fiscalía se busca inhabilitar a Miguel, denuncia Nora de Melgar”; “Pepe pregunta por qué tanto revuelo por Miguel”; “Miguel iba a renunciar el próximo mes de mayo”; “Villedistas” anuncian caravana en Valle.

En un breve recorrido por temas que ocuparon la agenda del país a la par del estrepitoso ruido político valen recordar:

Desde el lunes en Olancho los combustibles pasarán los cien lempiras

A tempranas del viernes y según proyecciones de la Comisión Administradora del Petróleo (CAP), el precio de las gasolinas pasará la frontera de los cien lempiras el galón.

La administradora de la CAP, Norma Rauda, detalló que en Patuca los precios han alcanzado 98.63, en Culmí a 99.05 y Manto a 98.14 lempiras. Por lo que con los incrementos anunciados a partir del próximo lunes 12 de marzo, se pasará la barrera de los cien lempiras. La versión fue confirmada oficialmente al final del mismo día.

Atlántida el más violento en 2011

Entre tanto, un informe del Conadeh revela que el departamento de Atlántida fue el más violento de Honduras en 2011, con 140.47 homicidios por cada 100 mil habitantes, aunque Cortés y Francisco Morazán reportan el mayor número de muertes violentas entre 2008 y 2011.

El estudio detalla que Honduras totalizó, en el 2011, la muerte violenta de 7,104 personas y una tasa nacional de 86.5 por cada 100 mil habitantes.

Otro importante hallazgo es que el porcentaje más bajo se refleja en los departamentos del occidente de Honduras, Copán, Santa Bárbara, Lempira, Ocotepeque e Intibucá que reportan la muerte violenta de 3,463 personas (15%)(2011).

Ante estas cifras escalofriantes, las autoridades hondureñas insisten que el “Operativo Relámpago” ha logrado disminuir los índices de muertes violentas en el país.

Ni la mitad de cuerpos entregados del siniestro de Comayagua

Otro de los temas que ha pasado a segundo plano es el de la situación precaria de las 24 cárceles a nivel nacional, donde los centros penitenciarios siguen siendo una bomba de tiempo.

Este día, el vocero del Ministerio Público, Melvin Duarte, informó que se han entregado 178 cuerpos de 270 que han sido identificados, de los 361 que murieron en el incendio de la cárcel de Comayagua, hecho ocurrido en pasado 15 de febrero.

Eso significa que ni la mitad de los cadáveres han sido entregados a sus apesarados deudos, quienes hacen todo tipo de protestas para que se agilice la entrega de los cuerpos.

¿Y los últimos “azos”?

Poco se recuerda una pregunta que cada vez con menos fuerza ronda en el ambiente, ¿qué ha sido de los últimos escándalos, como los “arrozazos” en sus series I, II y III, el “gasolinazo”, el contrato de 100 megavatios, las poco claras adquisiciones cámaras de seguridad pública, entre otros hechos?

Tampoco se sabe cómo han avanzado, si es que lo han hecho, las acciones respecto a estos temas en instituciones como el Ministerio Público, El Tribunal Superior de Cuentas.

Ante esta panorámica, pareciera que la agenda política terminará por borrar las huellas y sabores amargos que dejaron este tipo de actos que siguen en la impunidad.

Entre tanto el ciudadano de a pie sumido en la inseguridad y la precaria economía sigue con su cruz a cuestas.

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