Tegucigalpa/Washington – Los mensajes provenientes de Washington o enviados por sus altos funcionarios revelan que la lucha contra el crimen organizado transnacional y la corrupción no tienen marcha atrás en Centroamérica, especialmente en el llamado Triángulo Norte.
Primero el poderoso Comité de Relaciones Exteriores de la cámara baja del Congreso estadounidense emitió la resolución bipartidaria H. Res. 145 en la cual manifiesta su apoyo a los tres fiscales generales de Honduras, El Salvador y Guatemala, así como a las instancias de la CICIG en Guatemala y la MACCIH en Honduras en su lucha contra la corrupción y la impunidad.
Asimismo, los legisladores del comité enviaron su resolución al pleno de la Cámara de Representantes, la llamada cámara baja, a fin de su aprobación, con lo cual el peso de la misma sería mayor.
El republicano Ed Royce, presidente del comité, fue claro al señalar que la resolución “enfatiza el importante interés que tiene Estados Unidos en ver a los países de Centroamérica fortalecer instituciones débiles para poder combatir la corrupción”.
Los tres fiscales del Triángulo Norte, Thelma Aldana de Guatemala, Oscar Fernando Chinchilla de Honduras y Douglas Meléndez de El Salvador, están a cargo de dirigir las luchas en sus respectivos países contra organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico, lavado de dinero, tráfico de personas, armas y otras formas de criminalidad.
Visita de trabajo en Washington
Los tres fiscales iniciaron el jueves en Washington una visita de trabajo con una serie de reuniones con miembros del gabinete de gobierno de la administración del presidente Donald Trump, así como con importantes legisladores estadounidenses.
Washington está interesado en que las instituciones de los tres países, con alta violencia fuera de las zonas de guerra, puedan enfrentar y desmantelar las organizaciones criminales que utilizan sus territorios para el trasiego de drogas y personas provenientes de Sudamérica y cuyo destino es Estados Unidos.
Durante su jornada en la capital norteamericana, los tres fiscales se reunieron con el secretario de Seguridad Interior, John Kelly, para conversar “como parar a organizaciones criminales transnacionales en Centroamérica”, según un tuit de la embajada de Estados Unidos en Honduras.
Tres Fiscales Generales con Sec. de Seguridad Interna Kelly hablan como parar a organizaciones criminales transnacionales en Centroamérica pic.twitter.com/BuYh1W4KXK
— U.S. Embassy Teg (@usembassyteg) 30 de marzo de 2017
El gobierno norteamericano trabaja estrechamente con los tres fiscales a fin de coordinar sus acciones que permitan que las organizaciones narcocriminales y sus socios incrustados en elites políticas y empresariales, puedan ser desarticuladas y sus líderes enjuiciados en suelo estadounidense y otros en las instancias judiciales del Triángulo Norte.
Igualmente, los fiscales fueron recibidos por los legisladores norteamericanos, especialmente del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, e igualmente con delegados del Senado, la cámara alta del Congreso.
Tanto el gobierno, como el Congreso estadounidense están coordinados en su tarea de lograr que Centroamérica deje de ser una zona permisible para el crimen organizado transnacional y que el tráfico de drogas, personas, dinero sucio y otros no sea fácil para el crimen organizado.
Recientemente el Departamento de Estado señaló en su informe sobre drogas que “estima que aproximadamente el 90 % del tráfico de cocaína hacia los Estados Unidos en el 2016 transitaron por el corredor de México/Centroamérica”. Aunque EEUU reconoce los esfuerzos en el caso hondureño.
Pero de ese porcentaje, la importancia para Washington que los fiscales hagan su trabajo.
Igualmente, los legisladores señalaron su apoyo irrestricto a la Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad en Guatemala (CICIG) y la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH), dos instancias internacionales que ayudan a los dos países centroamericanos a combatir la corrupción y la impunidad, así como desmantelar los grupos mafiosos instalados en esas naciones.