Tegucigalpa – Vendedores del centro de Tegucigalpa, capital de Honduras, cierran por la fuerza negocios aledaños como instituciones bancarias y supermercados en la zona, al tiempo que solicitan a la alcaldía permisos para poder comercializar con todas las medidas de seguridad.
Los comerciantes alegan que viven del día a día y cuestionan a las autoridades municipales, a quienes reclaman cómo van a subsistir si no les permiten vender sus productos, por lo exigen que así como a otras empresas las dejan operar, les permitan a ellos lo mismo.
“Vamos a mantener cerrados todos los negocios, sino no nos llaman las autoridades a un diálogo para que nos dejen trabajar”, dijo Said Domínguez, uno de los vendedores manifestantes.
De igual forma, dijo que ellos nos son vendedores de puestos estacionarios y explicó que solo andan con una parrilla en las manos, al tiempo que recalcó que el producto que venden ayuda a la ciudadanía ya que son implementos como guantes y mascarillas.
En ese sentido, el comerciante ambulante, resalto que han cerrado al menos 50 negocios en la zona del centro de la ciudad exigiendo que a ellos también se les permita vender sus productos.
“Nosotros tenemos hambre, entonces nosotros necesitamos vender, la economía es precaria y tenemos cuatro meses y el gobierno lo único que nos ha dado son dos bolsas de comida”, recriminó Said Domínguez.
De igual forma, los vendedores ambulantes, exigen a la alcaldía que los organicen para que poder circular y comercializar con medidas de bioseguridad como el distanciamiento entre los vendedores.
Los vendedores ambulantes de la zona anunciaron seguir con las acciones durante todo el día mientras no lleguen a un acuerdo con autoridades de la alcaldía en donde se les permita circular y comercializar su producto por las calles del centro de Tegucigalpa.
