París – La responsable de seguridad del primer ministro francés, Édouard Philippe, Marie-Elodie Poitout, dimitió este jueves días después de verse implicada en la publicación de unas grabaciones del polémico excolaborador del presidente Emmanuel Macron, Alexandre Benalla, que salieron a la luz esta semana.
Poitout fue interrogada este martes por la brigada criminal a petición de la Fiscalía de París, ante quien negó ser la autora de unas comprometidas grabaciones entre Benalla y su amigo y responsable de seguridad del partido del Gobierno, La República en Marcha, Vincent Crase.
Pese a su negativa, según fuentes del Gobierno citadas por la prensa francesa, Poitout ha preferido presentar su dimisión para «evitar cualquier polémica» y ha defendido ante Philippe «no haber estado implicada de ningún modo en el encuentro entre Benalla y Crase».
Aún así, Poitout pidió ser dirigida a otra misión dentro del ministerio del Interior.
El pasado 31 de enero, el medio digital «Mediapart» publicó varios extractos sonoros de una conversación entre Benalla y Crase, grabados el 26 de julio, poco después del escándalo por el que el entonces colaborador de seguridad de Macron fue despedido y perseguido por la justicia tras haber sido grabado golpeando a manifestantes en las marchas del Primero de Mayo.
En las grabaciones, Benalla presumía ante su amigo de contar con el apoyo de Macron en este asunto, que causó una de las mayores crisis políticas del mandato del presidente francés.
El pasado fin de semana, la Fiscalía abrió una investigación por obtención ilícita de dispositivos de grabación de telecomunicaciones o conversaciones y de atentado contra la intimidad, tras lo que las autoridades trataron de registrar la sede de «Mediapart», cuyos directivos se negaron denunciando un intento de violar la privacidad de sus fuentes.
Por otro lado, fuentes de la Fiscalía Financiera confirmaron este jueves a Efe la apertura de una investigación por corrupción sobre el contrato de seguridad firmado por la empresa de Crase y un oligarca ruso, Iskander Makhmudov, una información que fue igualmente revelada por el citado digital francés.
«Mediapart» sostiene que este contrato fue negociado por Benalla antes de ser despedido por el Elíseo, mientras trabajaba al servicio de Macron.
