El fiscal Leonidas Rosa Bautista informó a Radio América que las investigaciones llevan a confirmar que personas o grupos que no identificó, estaban urdiendo un plan para asesinar a la jueza Alejandra Ochoa, y a la jefa de la Unidad Antisecuestros de la fiscalía especial contra el Crimen Organizado, Ana Patricia Domínguez Lobo.
Los mismos grupos estarían ordenando el asesinato de otro funcionario del Gobierno del presidente, Manuel Zelaya, con el propósito de desviar la atención sobre las muertes de las abogadas.
“Efectivamente las investigaciones provenientes de nuestra fiscalía especial pudieron detectar una especie de plan para causar daño a nuestra fiscal Ana Patricia Domínguez y a la juez Alejandra Ochoa”, declaró el fiscal.
Dijo que el plan está vinculado a las investigaciones que se siguen en el caso del secuestro de la estudiante de la Universidad Católica Johanna Lizeth Vigil Anariva, secuestrada el 6 de julio y liberada por las autoridades 20 días más tarde.
Por este caso, las autoridades detuvieron al subinspector de la policía preventiva Ronald Nahúm Maradiaga, supuesto cabecilla de la banda, en la que podrían estar implicados otros miembros de ese cuerpo
Rosa Bautista apuntó que se está brindando protección a las juezas amenazadas.
La denuncia de este plan surge una semana después del asesinato, el pasado día 7, de la jueza Alba Leticia Bueso, del Tribunal de Sentencia de San Pedro Sula (norte), crimen por el que han sido detenidos varios sospechosos.
A raíz del asesinato de Bueso y de varios abogados en los últimos meses, la Corte Suprema de Justicia pidió la semana pasada al presidente Zelaya una reunión de alto nivel entre los tres poderes del Estado para analizar la situación de seguridad del país.
Sin embargo, hasta ahora no ha habido respuesta del gobernante.