Tegucigalpa – La crisis política que vive Honduras aunado a la derrota oficialista en las elecciones generales del pasado 30 de noviembre hizo que el gobierno “olvidara” instalar la mesa de negociación para establecer el nuevo salario mínimo para el 2026.
El incumplimiento por parte del gobierno para instalar la mesa de negociación del nuevo salario mínimo deja, por ahora, a los obreros en incertidumbre que no conocen cuál será el ajuste que recibirán en 2026.
“Amarga y triste navidad para los trabajadores en nuestra amada Honduras. Este gobierno se va sin pena ni gloria, hubiesen cerrado este ciclo de gobierno negociando el salario mínimo, pero no se convocó como lo establece la ley que debe ser en el mes de noviembre”, expresó el dirigente obrero José Luis Baquedano.
Ahora la negociación será una nueva tarea que asuma la administración del presidente elector Nasry Asfura.
De su lado, el representante del sector privado Rafael Medina expresó que la demora en las negociaciones no debe generar incertidumbre ni el sector empleador y tampoco en los trabajadores.
“Esperemos que los acuerdos que se logren sean de beneficio de todo el país”, mencionó.
De acuerdo a la ley, los trabajadores deben recibir un ajuste salarial con base a la inflación, estimada este año en 5 % como una forma de compensar el poder adquisitivo.
Para el 2025 se aprobó un ajuste de 5.5 % en empresas de 1 a 10 trabajadores y de 11 a 50 trabajadores, 6.5 % de 51 a 150 empleados, y 7 % de 151 en adelante que representó entre 600 y 1 mil 400 lempiras para cada empleado. JS








