Miami (EE.UU.).- Un juzgado de Miami rechazó la moción de liberación que solicitó el pasado marzo el ecuatoriano Víctor Medranda, acusado de narcotráfico y detenido por un buque de la Armada estadounidense en aguas del pacífico a bordo de una pequeña embarcación pesquera.
De acuerdo al informe publicado por la corte el viernes, la jueza Joan Lenard desestimó el pedido del joven de 23 años y apoyó el argumento de la oficina federal de la Fiscalía, que había indicado que el barco en el que fue apresado Medranda carecía de matrícula y, por tanto, se encontraba bajo la jurisdicción de las leyes de Estados Unidos.
Medranda, detenido junto a dos mexicanos en enero por tripulantes del navío, señaló en su alegación que su detención era ilegal, dado que los delitos por narcotráfico no están sujetos bajo la jurisdicción universal.
Tal como señaló hoy El Nuevo Herald, su abogado defensor, Arturo Hernández, procederá a discutir el fallo con su cliente, aunque adelantó una probable apelación del mismo.
Bajo los principios del derecho internacional, la jurisdicción universal abarca seis crímenes, entre ellos el genocidio y crímenes contra la humanidad, sin embargo no incluye ningún delito relacionado con el narcotráfico.
Tal como recoge el medio, el fiscal federal Kurt Lunkenheimer rechazó la moción del detenido y señaló que su arresto fue legal, porque se encontraban en aguas internacionales a bordo de una «embarcación apátrida».
El bote pesquero, de tipo panga, fue interceptado a unas 300 millas de la costa sur de México por el navío USS Rentz, con base en San Diego y que patrullaba la zona como parte de una campaña en aguas del Pacífico y el Caribe para desarticular las rutas marítimas de bandas que trafican con drogas.
Tras su detención, el capitán del pequeño barco, José Esperansa Ramírez, indicó que el bote estaba registrado en México, afirmación que las autoridades de este país no pudieron confirmar, según señalaron los oficiales estadounidenses.
Medranda, detenido junto a dos mexicanos en enero por tripulantes del navío, señaló en su alegación que su detención era ilegal, dado que los delitos por narcotráfico no están sujetos bajo la jurisdicción universal.
Tal como señaló hoy El Nuevo Herald, su abogado defensor, Arturo Hernández, procederá a discutir el fallo con su cliente, aunque adelantó una probable apelación del mismo.
Bajo los principios del derecho internacional, la jurisdicción universal abarca seis crímenes, entre ellos el genocidio y crímenes contra la humanidad, sin embargo no incluye ningún delito relacionado con el narcotráfico.
Tal como recoge el medio, el fiscal federal Kurt Lunkenheimer rechazó la moción del detenido y señaló que su arresto fue legal, porque se encontraban en aguas internacionales a bordo de una «embarcación apátrida».
El bote pesquero, de tipo panga, fue interceptado a unas 300 millas de la costa sur de México por el navío USS Rentz, con base en San Diego y que patrullaba la zona como parte de una campaña en aguas del Pacífico y el Caribe para desarticular las rutas marítimas de bandas que trafican con drogas.
Tras su detención, el capitán del pequeño barco, José Esperansa Ramírez, indicó que el bote estaba registrado en México, afirmación que las autoridades de este país no pudieron confirmar, según señalaron los oficiales estadounidenses.
