Por. Thelma Mejía
¡Noooooo! ¿Qué hiciste? Tírala, tírala…eso es, vamos Costa Rica, vamos Costa Rica, eran los gritos de la periodista Orfa Mejía, mientras se agarraba sus cabellos, se comía las uñas y apretaba los puños en señal de impotencia porque el gol tico no caía en el marco holandés, durante el partido de infarto en el cual la selección de Costa Rica culminó su sueño futbolista al ser derrotada por Holanda por la vía de los penaltis.
Confieso que nunca había visto tantas emociones concentradas. Acompañando a Orfa en ese sufrir de partido, estaba el ex comisionado adjunto del Conadeh, Nery Velásquez, quien tenía el “corazón partido” entre la solidaridad centroamericana y catracha con Costa Rica y el equipo del mundial que más le gusta que es Holanda.
Fue así cuando escuché la expresión ¡qué la cuja ese jugador!, ante una posibilidad tica de gol. ¿Qué es la cuja?, pregunté. Alguien que es “maleta, leña, la riata”, me dijeron, sin despegar la vista del televisor. Pero “la cuja” en Olancho es sinónimo de gordura y su significado parece cambiar, según los modismos o regionalismos.
Picada por la palabra la busqué con “K” y ahí “Kuja” tiene un origen japonés y se refiere a las famosas mujeres guerreras conocidas como “las Amazonas” y son sinónimo de fuerza y energía. Nada que ver en nuestros modismos, pero al parecer, hay en el mundial más de un jugador “la cuja”.
La concentración de Orfa y Nery en el partido, era interrumpida de vez en cuando por la colega Nora Sagastume, que ese día se traía un rollo con los tatuajes que usaban los futbolistas en el mundial. Intentaba explicar simbolismos, que si eran parte de la historia, que si el arte rupestre, que si un dibujo era más femenino que otro…hasta que le salió su lado futbolero y se puso a explicar las jugadas.
Que conste, no le gusta el fútbol, dice, pero nos dejó apantallados al explicar los tiros libre, una de las reglas del fútbol que desde que empecé a escribir de estas vainas me comentó German Henry del Cid. Según recuerdo, los tiros libres son aquellos que se dan fuera del área de los penalti y son igual de peligrosos, máxime si lo ejecutan jugadores expertos como Neymar (de Brasil que se perdió el mundial por una lesión) Cristiano Ronaldo (de Portugal) o Lionel Messi (de Argentina).
Yo los escuchaba y me reía mientras me disponía a preparar algo de comer, en una improvisada reunión que se armó luego de un buen café tempranero. El escenario fue el cálido vecindario en donde resido.
Los gritos de Orfa hacían que de vez en cuando se cruzara por el pasillo, el periodista German Reyes con su típica expresión: ¡Joder! Este sí es ambiente.
Hasta que apareció Tim Krull y atajó dos penales para sellar el sueño tico de ir a semifinales. Costa Rica se despidió con dignidad y puso en alto a la CONCACAF que agrupa a los países centroamericanos, del Caribe, México y Estados Unidos.
¿Qué pasó? Hasta donde me explicaron, el fútbol además de pasión, esfuerzo y compromiso, es también estrategia. Y eso fue lo que hizo el entrenador holandés Louis Van Gaal, al poner a Krull y dejar atónitos a todos los comentaristas del mundo, que cuestionaron su determinación para quedar mudos después y terminar alabando su hazaña.
Van Gaal lejos de desesperarse, calculó todo hasta el final. Es el trabajo de los estrategas del fútbol, me ilustró German Reyes, al advertir cuando ingresó Krull por donde venía la jugada de Holanda. Recordé entonces, el Arte de la Guerra de Sun Tzu.
Y mientras hacían sus cábalas sobre quiénes se disputarán la gran final, entró al debate futbolístico otra apreciación no menos importante. La visión femenina de los jugadores. Fue Karla Posas quien empezó el debate por el chat “Aleros”, mientras Orfa respondía y en voz alta todos sonreíamos.
Creativa como es costumbre, la colega Karla Posas comenta: es cierto que hay que ser solidarios y los ticos tienen toda nuestra solidaridad y cariño, pero ¿vieron que guapo está ese (Robin) van Persie?, un delantero holandés que juega en el Manchester United de Inglaterra.
¡Es que este mundial nos ha dejado tan buen efecto visual!, agregaba Orfa, mientras Karla comentaba su dilema ético de apoyar a América, cuando pensaba en Robin van Persie. Así fueron surgiendo nombres de futbolistas de Francia y otras selecciones de varios países que no recuerdo, porque la risa me impedía concentrarme. Que saltos esos del fútbol, de las estrategias y el estratega, al efecto visual que dejan los jugadores. Es otro nivel el fútbol, jajjaja.
En la sala de redacción las colegas también comentan sobre el físico de los jugadores, que si les gusta cómo juegan, que si la definición de sus músculos es perfecta, que si las nalgas de un tal (Paul) Pogba de Francia son alucinantes, en fin, son las otras cosas que se dan alrededor del fútbol. Los hombres, se callan para interrumpir comentando la belleza de las mujeres que van a ver los partidos del mundial.
Como ven, no todo en el fútbol es balón. Los comentarios son diversos y a días de que esto acabe, así como mi paso de principiante del fútbol, intentaré contarles de esas identidades “ligeras” y “duras” que encierra el fútbol, según un artículo de Fernando Mires que me envió mi colega y escritora, Isolda Arita, admiradora de Franz Beckenbauer, el gran “Kaizer” de la selección alemana y considerado uno de los más destacados futbolistas del mundo.