Nueva York – El alcalde electo de Nueva York, Bill de Blasio, proclamó hoy que tiene un mandato «claro» de los ciudadanos para poner en marcha su programa electoral, que incluye un claro giro a la izquierda para luchar contra la pobreza y la desigualdad en la ciudad.
De Blasio fue elegido el martes como nuevo alcalde con un abrumador 73,3 por ciento de los votos, frente al 24,3 por ciento del republicano Joe Lhota, en lo que supone el margen de victoria más elevado en un candidato que no ocupara previamente la alcaldía.
«El pueblo de la ciudad ha hablado, el mandato es claro», afirmó hoy en su primera rueda de prensa como alcalde electo, en la que insistió en su tema central de campaña: la lucha contra la desigualdad económica y la pobreza, que afecta a millones de neoyorquinos.
«Tenemos la obligación crear una ciudad en que la prosperidad sea compartida y haya oportunidades para todos», añadió el alcalde electo, cuyo historial e ideario político se sitúan claramente en el ala izquierda del Partido Demócrata, en una nueva constatación de que Nueva York es una isla extraña en el mapa político de Estados Unidos.
El mandato obtenido por De Blasio es muy claro «se mire como se mire», afirmó a Efe Jeanne Zaino, politóloga de New York University, quien añadió que en términos prácticos «no es posible lograr una ventaja mayor» que 49 puntos porcentuales, un margen «histórico».
La participación en las elecciones fue la más baja desde 1917, y todos los analistas coinciden que se debió a que estaba muy claro el resultado, aunque Zaino considera que afectó a los dos candidatos por igual.
De Blasio anunció que va a acelerar el proceso de transición para empezar a tomar decisiones nada más llegar al Ayuntamiento.
El nuevo alcalde asumirá el cargo el mismo 1 de enero, por lo que ha comenzado ya a preparar la transición, un asunto que trató la mañana de este miércoles con el actual burgomaestre, Michael Bloomberg.
«Tenemos que preparar rápidamente las piezas para poder llegar al ayuntamiento listos para actuar», afirmó De Blasio, quien avanzó que buscará una administración municipal «que refleje la diversidad» de la ciudad.
Esa frase aludió, aunque sin mencionarla directamente, a la gestión de Bloomberg, quien en sus doce años al frente de la ciudad ha recibido muchas críticas por los pocos altos cargos de las minorías, que en esta ciudad constituyen una mayoría.
Zaino consideró que, además de diversidad racial, De Blasio debe aplicar una diversidad de género, por lo que valoró que, de los cuatro cargos de su equipo de transición anunciado este miércoles tres son mujeres, una de ellas latina y la otra afroamericana.
Sin embargo, recalcó que los dos grandes nombramientos que van a definir en buena parte su mandato son los de comisionado de policía y responsable de educación, dos de los departamentos claves de la ciudad.
En lo que parece que va a ser una costumbre de incluir segmentos de sus intervenciones en español, De Blasio avanzó en esta lengua que su gobierno local será «progresista y competente».
«Vamos a cumplir con la misión que el pueblo nos ha confiado, la construcción de una ciudad donde todo el mundo comparte la prosperidad y el éxito», insistió.
De Blasio anunció el nombramiento de dos copresidentes de su equipo de transición y de dos directoras de personal, una de las cuales será Ursulina Ramírez, su adjunta en la oficina del defensor del pueblo, un puesto que ha ejercido desde 2010.
El futuro alcalde anunció también el lanzamiento de una página de internet y de una cuenta de la red social Twitter en la que el equipo de transición divulgará los avances en el proceso.
De Blasio se reunió durante la mañana de este miércoles con Bloomberg, en un encuentro que calificó de «útil» para poder comenzar a coordinar el trabajo de los respectivos equipos.
«El pueblo de la ciudad ha hablado, el mandato es claro», afirmó hoy en su primera rueda de prensa como alcalde electo, en la que insistió en su tema central de campaña: la lucha contra la desigualdad económica y la pobreza, que afecta a millones de neoyorquinos.
«Tenemos la obligación crear una ciudad en que la prosperidad sea compartida y haya oportunidades para todos», añadió el alcalde electo, cuyo historial e ideario político se sitúan claramente en el ala izquierda del Partido Demócrata, en una nueva constatación de que Nueva York es una isla extraña en el mapa político de Estados Unidos.
El mandato obtenido por De Blasio es muy claro «se mire como se mire», afirmó a Efe Jeanne Zaino, politóloga de New York University, quien añadió que en términos prácticos «no es posible lograr una ventaja mayor» que 49 puntos porcentuales, un margen «histórico».
La participación en las elecciones fue la más baja desde 1917, y todos los analistas coinciden que se debió a que estaba muy claro el resultado, aunque Zaino considera que afectó a los dos candidatos por igual.
De Blasio anunció que va a acelerar el proceso de transición para empezar a tomar decisiones nada más llegar al Ayuntamiento.
El nuevo alcalde asumirá el cargo el mismo 1 de enero, por lo que ha comenzado ya a preparar la transición, un asunto que trató la mañana de este miércoles con el actual burgomaestre, Michael Bloomberg.
«Tenemos que preparar rápidamente las piezas para poder llegar al ayuntamiento listos para actuar», afirmó De Blasio, quien avanzó que buscará una administración municipal «que refleje la diversidad» de la ciudad.
Esa frase aludió, aunque sin mencionarla directamente, a la gestión de Bloomberg, quien en sus doce años al frente de la ciudad ha recibido muchas críticas por los pocos altos cargos de las minorías, que en esta ciudad constituyen una mayoría.
Zaino consideró que, además de diversidad racial, De Blasio debe aplicar una diversidad de género, por lo que valoró que, de los cuatro cargos de su equipo de transición anunciado este miércoles tres son mujeres, una de ellas latina y la otra afroamericana.
Sin embargo, recalcó que los dos grandes nombramientos que van a definir en buena parte su mandato son los de comisionado de policía y responsable de educación, dos de los departamentos claves de la ciudad.
En lo que parece que va a ser una costumbre de incluir segmentos de sus intervenciones en español, De Blasio avanzó en esta lengua que su gobierno local será «progresista y competente».
«Vamos a cumplir con la misión que el pueblo nos ha confiado, la construcción de una ciudad donde todo el mundo comparte la prosperidad y el éxito», insistió.
De Blasio anunció el nombramiento de dos copresidentes de su equipo de transición y de dos directoras de personal, una de las cuales será Ursulina Ramírez, su adjunta en la oficina del defensor del pueblo, un puesto que ha ejercido desde 2010.
El futuro alcalde anunció también el lanzamiento de una página de internet y de una cuenta de la red social Twitter en la que el equipo de transición divulgará los avances en el proceso.
De Blasio se reunió durante la mañana de este miércoles con Bloomberg, en un encuentro que calificó de «útil» para poder comenzar a coordinar el trabajo de los respectivos equipos.
