Tegucigalpa – Los damnificados de la aldea La Reina, la pequeña comunidad del municipio de Protección, Santa Bárbara que hace tres años fue borrada del mapa por alud causado por las lluvias de Eta y Iota y que desde las primeras semanas de este año tienen un nuevo hogar, ahora están trabajando para tener un edificio escolar.
El acarreo de piedras para la construcción de la escuela Manuel Bonilla, en la recién habitada colonia San Francisco de Asís en el municipio de Macuelizo, Santa Bárbara, comenzó este fin de semana, informó el padre de la parroquia San Roque en Santa Bárbara, Leopoldo Serrano, quien ha estado realizado gestiones para que las familias tengan un techo después de la tragedia.
Mediante una transmisión en las redes sociales de la página No matarás, el padre Serrano mostró el entusiasmo de los pobladores que de forma voluntaria se sumaron a la convocatoria del guía espiritual.
Niños, jóvenes y adultos se unieron a la actividad, algunos se auxiliaron con motocicletas, con carretas de mano, otros con sus hombros y los más pequeños con sus manos.
Doña Angela (65) dijo que tiene una nieta en la escuela y otro en el colegio. “Queremos construir nuestra escuela”, afirmó un padre de familia mientras trasladaba una piedra en su motocicleta.
En la colonia San Francisco de Asís, además de los damnificados de La Reina, otras familias que perdieron sus hogares a causa de inundaciones también fueron beneficiadas con la entrega de viviendas, incluyendo pobladores de las comunidades de El Sauce, Flores de Mayo, en el departamento de Santa Bárbara.
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Al iniciar el año escolar, los niños y adolescentes de la nueva colonia no tenían ni maestros ni aulas para recibir el pan del saber, pero tras una asamblea donde los padres pidieron el retorno de la estructura educativa que tenían en la zona de la tragedia, recibieron respuesta de las autoridades educativas. Ahora están buscando tener sus aulas escolares. VC
