Las relaciones «están plenamente normalizadas» y se abre «una etapa de cooperación, de renovación de la amistad histórica y el apoyo recíproco», destacó el canciller anfitrión, Felipe Pérez Roque, al terminar la III Reunión del Mecanismo de Información y Consultas Políticas de ambos países.
or su parte, la secretaria de Exteriores de México, Patricia Espinosa, que llegó hoy a Cuba para una visita oficial de dos días, resaltó que los acuerdos firmados «representan la culminación de un largo periodo de negociaciones, consultas y conversaciones», iniciadas por el Gobierno de Calderón.
Según un comunicado conjunto, en septiembre próximo Pérez Roque viajará a México y llevará a Calderón la invitación de Raúl Castro para que cumpla una visita oficial a la isla, cuya fecha será acordada «posteriormente».
El documento indicó que se examinaron tratados conjuntos, temas de política internacional y áreas de cooperación económicas y sociales.
Se reactivaron más de diez mecanismos bilaterales que estaban paralizados por el deterioro de las relaciones durante el Gobierno del anterior presidente mexicano, Vicente Fox (2000-06), y los cuales incluyen intercambios en migración, inversiones, comercio, ciencia, tecnología, educación y formación de recursos humanos.
Ambos países coincidieron en la importancia de establecer un marco jurídico que, con un «enfoque integral y bajo el principio de responsabilidad compartida, garantice un flujo migratorio legal, seguro y ordenado».
Para Espinosa, se trata de un tema «de fundamental importancia», en el cual se buscará que los ciudadanos de Cuba y México «no sufran los efecto del tráfico ilegal».
Con la firma hoy de acuerdos entre el Banco Exterior de México (Bancomext) y el Banco Nacional de Cuba, Pérez Roque consideró «superado» el litigio sobre una deuda de unos 400 millones de dólares del segundo al primero.
De igual modo, calificó de «escollo superado» el enfrentamiento «en el tema de los derechos humanos y las posiciones de ambos países en los organismos internacionales».
Pérez Roque apuntó que el Gobierno cubano apoyará la candidatura de México como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en las elecciones que tendrán lugar a fines de este año en la Asamblea General, para el periodo 2009-10.
Con la suscripción del Acta de la III Reunión del Mecanismo, los dos Gobiernos resaltaron que comienza «una nueva etapa de comprensión, de amistad, y de cooperación».
«Hemos creado una base clara sobre la cual se asientan las relaciones de México y Cuba», dijo Pérez Roque y aseguró que esos lazos bilaterales se fundan en «principios del derecho internacional», como el «respeto a la soberanía» y «la no injerencia en los asuntos internos de otros países».
«Es esta relación respetuosa, es este diálogo abierto, lo que nos permitirá superar en el futuro cualquier tipo de diferencias de opinión que pudiéramos tener», sostuvo Espinosa al recordar que después de 10 años se ha logrado abrir un «mecanismo de diálogo político».
Las relaciones de estos países estuvieron al borde de la ruptura durante el mandato de Fox, que retiró a su embajadora en La Habana, Roberta Lajous, y expulsó al cubano Jorge Bolaños, tras acusar al Gobierno que entonces presidía Fidel Castro de entrometerse en asuntos internos.
Espinosa no tiene prevista una reunión con el actual presidente cubano, pero sí con uno de los vicepresidentes, Carlos Lage, con el presidente de la Asamblea, Ricardo Alarcón, y con el jefe del departamento de Relaciones Internacionales del Partido Comunista, Fernando Remírez de Estenoz.