spot_img

“Crucial y urgente” que se implementen “alertas tempranas” en zonas inundables: Conadeh

Tegucigalpa- El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) calificó de “crucial” y “urgente” que las autoridades hondureñas implementen mecanismos de “Alerta Temprana” en comunidades o zonas inundables al estar cerca de ríos y quebradas, ya que la vida y la salud de personas, que allí residen, se encuentran en riesgo.

Además, recomendó, al Estado hondureño, asegurar la protección de la salud de la población, priorizando a las

Poblaciones más vulnerables como las niñas, niños, adultos mayores, pueblos indígenas, afrohondureños, campesinos, a las    personas que viven en condición de pobreza extrema y todas aquellas comunidades sin acceso adecuado a servicios de salud.

La Institución Nacional de Derechos Humanos considera que el sistema de salud pública, en el país, por años ha estado en crisis y requiere ser fortalecido con un enfoque adaptado al cambio climático, implementando medidas preventivas y programas de salud para hacerle frente a enfermedades relacionadas con el clima y tomar en consideración el nivel de riesgo que se experimentan en cada uno de los departamentos del país.

Frank Cruz, coordinador de la Defensoría de Pueblos Indígenas y Afro-hondureños del Conadeh advirtió que el cambio climático es una amenaza para la salud y el bienestar de las personas, y que los Estados tienen la obligación de tomar medidas para proteger ese derecho.

En el caso de Honduras, el cambio climático ha generado condiciones propicias para la proliferación de enfermedades transmitidas por vectores como el dengue, zika y chikungunya.

Solo en el  2024, Honduras reportó más de 144,142 casos de dengue y 190 muertes, lo que reflejó una crisis sanitaria que desbordó los sistemas de salud locales.

Cruz explicó que, en los primeros meses del 2025, la contaminación del aire derivada de incendios forestales agravó enfermedades respiratorias, afectando principalmente a niñas y niños y adultos mayores.

Además, que la exposición a temperaturas extremas también incrementó los riesgos de deshidratación, afectando, principalmente, a las personas que trabajan al aire libre.

Según el testimonio de los propios afectados, tanto las inundaciones como los deslizamientos de tierra han contaminado fuentes de agua potable, aumentando la propagación de enfermedades gastrointestinales e infecciones cutáneas en comunidades con infraestructura sanitaria deficiente.

La falta de programas de salud pública adaptados a los nuevos riesgos climáticos ha generado una respuesta insuficiente ante estos desafíos, cuestionó Cruz.

Mencionó que, el Conadeh tuvo acceso a  personas afectadas por huracanes que han azotado al país y afirmaron que el agua potable de sus comunidades se contaminó debido a que las fuentes de agua se ensuciaron y contaminaron por las inundaciones, los deslizamientos de tierra y la basura que arrastraron las lluvias.

Otros testimonios fueron contundentes al señalar los altos niveles de “estrés y ansiedad” que enfrentan las personas que viven cerca de ríos, quebradas y otras  fuentes de agua, ya que son las primeras afectadas por inundaciones y, a la vez, asumen la responsabilidad de alertar al resto de la comunidad.

Muchas de las personas de habitan en viviendas proclives a las inundaciones sufren de hongos en la piel y pies, a consecuencia de la humedad en el suelo de sus hogares

En mayo pasado, el Conadeh emitió un informe especial que devela la critica situación que vive el país con el cambio climático, lo que se constituye en una creciente amenaza que  afecta el goce efectivo de, al menos, una decena de derechos humanos, principalmente de las personas que viven en condición de vulnerabilidad.

spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_imgspot_img