spot_img

Crisis venezolana puede ser un espejo para Honduras: Alfredo Keller

Compatir:

Tegucigalpa– La realidad venezolana es el reflejo que debe retratar a los aprendices de Hugo Chávez, dice Alfredo Keller, un estratega y analista político con gran prestancia en América Latina. Advierte que la situación que atraviesa ese país debe ser analizado por los hondureños para no caer en falsos espejismos que chocan con duras realidades que ahora mantienen en desencanto a un amplio sector del chavismo.
 

Tras las reformas constitucionales que promueve el llamado Socialismo del Siglo XXI hay una estrategia oculta de perpetuarse en el poder y hoy Venezuela aunque muchos ciudadanos pueden con 100 dólares comprar un televisor plasma, no tienen para lo básico: la comida, explica el analista.

Para este hombre, el modelo venezolano es un fracaso, producto del desfase de pensamiento y de las acciones corruptas de un grupo de poder controlador, que no ha tenido la habilidad de encarar y responder a las necesidades del pueblo venezolano.

Keller en esta segunda entrega de una amplia entrevista, relata a Proceso Digital la situación que desde su punto de vista viven los venezolanos, un país liderado por el presidente Nicolás Maduro, quien asumió el mando tras la muerte de Hugo Chávez:“En Venezuela se está viviendo en estos momentos un verdadero caos, un desorden impresionante en términos económicos y en términos políticos”.

Para él , la crisis venezolana tiene una data de varios años: “eso es largo y complicado explicarlo, pero voy a tratar de sintetizarlo porque en realidad lo que está sufriendo Venezuela no es producto de Maduro, quien es un administrador mal dotado, poco formado, que ignora por completo las reglas de la economía y se deja llevar por intereses muy oscuros, no venezolanos, aunque también venezolanos cuyos intereses no tienen nada que ver con la estabilidad del país y la tranquilidad de los ciudadanos”.

Se refiere a la crisis económica y social de su país al decir que “un país que sufre en este momento la mayor inflación del mundo, 55 por ciento de inflación, se estima que llegará quizá a 60 a finales de este año, una escasez que registra el 95 por ciento de los ciudadanos en productos básicos, como el aceite, la mantequilla, la leche, las carnes, el maíz con el cual ustedes hacen tortillas y en Venezuela se hacen arepas y de eso vive la gente y estas cosas no existen en el mercado de manera regular y en abundancia”.

Achaca esos males al antecesor de Maduro: “Esto es consecuencia de unas políticas un poco trasnochadas del propio Chávez que inician en el año 2005, en realidad un poco antes con decisiones como control de divisas, control de cambios, montones de controles dirigidos a limitar la libertad de mercado y de empresas, expropiaciones, todo eso ha derivado en una pérdida de inversiones y por consecuencia en el cierre de muchísimas fuentes de empleo que en los casos que no fueron cerradas, sino que simplemente expropiadas, el Estado fue incapaz de manejarlas y dejaron de ser productivas con lo cual se convirtieron más bien en una carga pesada en torno al Estado.

El petróleo, dice, no fue una tabla de salvación económica sino una rendija de convenios ideológicos, “como este es un país petrolero, con mucho flujo de caja, el gobierno no le dio importancia a la pérdida a la capacidad productiva del país, porque tenía dinero para sustituir lo que ya el país dejaba de producir importándolo de cualquier otro país del mundo, especialmente de aquellos países con los cuales tenía tratos ideológicos”.

Sigue manifestando que “como es un país pro socialismo, pues hoy en día el café que tomamos viene de Nicaragua, los pollos vienen de Brasil, la leche viene de Ecuador y así sucesivamente, sin embargo, esto se ha prestado a grandes casos de corrupción, a casos escandalosos de importación de alimentos de mala calidad o alimentos que simplemente por incompetencia en la comercialización se pudren en los puertos y hemos tenido centenares de contenedores cargados de alimentos que se pudren y que no se pueden distribuir y cosas por el estilo, al punto que hoy en día el país prácticamente importa el 70 por ciento de lo que se consume en términos de alimentos”.

Rememora que Venezuela “era un país que antes de la llegada de Chávez exportaba café, harina, carne, exportaba de todo y hoy en día prácticamente hay que importarlo casi, casi todo, así que el país entra además a una vorágine, no solamente de corrupción, sino que también de malos negocios con sobre ventas, demasiados caros, ese oportunismo político que fue dejando las arcas vacías. Por ejemplo, hace siete años las reservas líquidas eran de 33 mil millones de dólares y hoy en día son apenas de 1 mil 600 millones de dólares, lo que dan solamente a respaldo a importaciones por unas semanas, es decir que estamos en el borde de la quiebra en este país”.

Agrega que “frente a esta crisis financiera, en un país que se ha quedado sin dinero, sin divisas por el mal uso de ellas, nos encontramos entonces con que el dinero ya no alcanza para las importaciones necesarias. Paradójicamente un gobierno que se declara socialista donde el presidente Chávez declaraba que ser rico era malo, sin embargo, toda su política para enfrentar elecciones y aquí todos los años hay elecciones, consistía en incentivar el consumo, entonces tenemos una paradoja, es un país socialista consumista, que no hay nada más capitalista que el consumismo y como además se imprime dinero constantemente que es la causa de la inflación, entonces hay mucho circulante”.

“Esos bolívares”, agrega,- “que no valen absolutamente nada esa moneda porque no tiene valor de transacción va deteriorando el comercio, va deteriorando el abastecimiento primario y se va creando una onda expansiva terrible de gravísima consecuencia en términos de precios, en términos de inflación, en términos de abastecimiento y esa es la situación que tenemos ahora”.

A elecciones nuevamente

Venezuela esta las puertas de un proceso electoral a inicios de este diciembre y sobre eso el estratega y experto en comunicación política dice que “ nosotros tenemos también elecciones en Venezuela a principio de diciembre, son elecciones municipales las cuales el gobierno corre el riesgo de perderlas, de hecho los estudios de opinión pública acá muestran claramente que el gobierno está en minoría, que lo va a llevar a la derrota electoral en estas elecciones, algo muy grave para el gobierno porque abre las puertas a una lectura de la necesidad de un cambio, cosa que ya está pidiendo el 80 por ciento de los venezolanos”.

Frente a la realidad electoral dice Alfredo Keller, “el gobierno de Maduro en vez de reconocer la responsabilidad de que las políticas públicas, iniciadas con Chávez, son las que han llevado a este desastre y lo que ha hecho de echarle la culpa a un tercero de tal manera que ellos no sean los culpables y esos terceros son los empresarios, quienes son los que pagan ahora el plato roto de la situación económica”.

El analista dice que para entender las últimas acciones gubernamentales en torno a intervenir negocios y cerrar portales de internet, debe tomarse en cuenta que “el valor del bolívar con respecto al dólar es totalmente falso, tanto su valor teórico oficial que es 6,30 bolívares por dólar, no es verdad que ese sea su valor comercial como el “dólar negro”,que está más caro a 63 bolívares, también es falso, pero es producto de la escasez y de la demanda del mercado, un mercado que demanda divisas para poder importar y no existen las divisas suficientes de comprador oficial de 6,30 porque también es una falsedad”.

Prosigue hablando del asunto monetario y manifiesta que “entonces la gente recurre al dólar paralelo en esa misma medida aumenta su demanda y por tanto menos su valor, así que esa es la gente, la gente que importa con el dólar paralelo y vende al valor del dólar paralelo, es decir, a 10 veces el valor real o el valor oficial. El gobierno que ha estado entregando por cuenta gotas las divisas a 6,30 alega que todo lo que se vende tendría que estar a un valor de 6,30 y no reconoce el dólar paralelo o negro, al que alude ser ilegal”.

Ejemplifica expresando que “por tanto, si usted compró, digamos, repuestos para automóviles en Japón para los Toyota, para los Nissan o compró repuestos en los Estados Unidos para automóviles Chevrolet o Ford, y los tuvo que pagar a 60 bolívares, el gobierno pretende que usted lo venda al equivalente de 6,30; naturalmente eso genera una inmensa pérdida y la gente se resiste a eso, así que lo que hizo el gobierno frente a la amenaza de perder las elecciones fue irse por el lado populista, es decir, acusaron a los empresarios de estar especulando, haciendo actos de usura, sacrificando el salario del pobre, etc.”.

La justificación oficial para Keller no es más que “ un discurso muy populista y fue más lejos que eso porque ordenó la baja costosa de los precios y además incentivó lo que terminó siendo abiertos saqueos de muchas tiendas de electrodomésticos que por allí comenzó lo que hoy ya va por jugueterías, ventas de ropa, zapaterías y cosas de estas. Entonces hay todo un terrorismo grandísimo”.

Más cerrojos a la libertad

También se refiere al cierre de portales en la Web, “cerrando portales de internet y el que hable del valor paralelo del dólar automáticamente es ilegalizado, satanizado y cerrado. Porque mientras tanto el gobierno hizo un decreto de que se reserva al derecho de censurar la información que perjudique la tranquilidad del país, entre comillas, y esto le permite entonces al gobierno cerrar medios de comunicación, cerrar portales de internet”.

Agudiza el tono y dice que “la situación es tan grave que naturalmente un empresario, digamos, un periódico quiere comprar el papel de impresión de su periódico lo tiene que hacer en el exterior porque Venezuela ya no produce papel tampoco, entonces recurre al gobierno y le dice“señores denme divisas a valor oficial para poder comprar el papel”, entonces el gobierno en vista de que muchos periódicos no están alineados con el “ofici-chavismo”,simplemente les niega los dólares y para mantener el periódico abierto han tenido que recurrir al dólar paralelo a comprar el papel.

La consecuencia de esta acción, expresa Alfredo Keller, afecta a la prensa porque “la consecuencia de esto es que un diario esta diez veces más caro que un diario normal y corriente, estos naturalmente no lo puede enfrentar el periódico porque la gente no lo compraría, entonces lo primero que ha ocurrido es que los periódicos se han reducido a una mínima expresión de muy pocas páginas. Lo segundo que ha ocurrido es que las separatas de un periódico dominical, por ejemplo, la sección cultural, etc., han desaparecido porque ya los periódicos no tienen papel y el gobierno se niega a darle los dólares, pero así como eso se niega a darle los dólares a distintos sectores económicos”.

Agrega que por ejemplo “al sector industrial o les da una mínima parte de lo que necesitan. El sector privado venezolano este año y el sector industrial solo ha percibido el 7 por ciento de las divisas que necesita para su operación y funcionamiento, así que es un país condenado a vivir y depender exclusivamente del petróleo que administra el gobierno y eso nos va a conducir inevitablemente, a menos que haya una revuelta que cambie estas circunstancias, nos va a llevar a vivir una situación crecientemente como la de Zimbabue que decretó la prohibición de la inflación de su país o nos va a llevar a un régimen como el cubano” advierte.


La herencia de Hugo Chávez

Para el especialista en mediciones de opinión pública, “es terrorífico lo que está pasando en el país, pero naturalmente estas decisiones populistas que ha tomado Maduro han generado también la alegría de mucha gente porque un televisor plasma está siendo vendido a un precio ganga, al equivalente a 100 dólares en el mercado hondureño y naturalmente si la gente tiene 100 dólares con que comprarse uno o varios televisores de ese tipo a sabiendas que el día de mañana no van a haber más televisores plasma y tendrán posibilidades de revenderlos después a un precio más adecuado, entonces aquí se ha producido un desorden espantoso que se origina con las políticas de Chávez y que revienta en manos de Maduro”.

Luego se refiere a Nicolás Maduro y dice “es una persona que habla con pajaritos, ve fantasmas en los muros en el metro de Caracas y ese tipo de cosas. Una persona que está revelando su condición violenta, autocrática, autoritaria, con estas medidas que toma y una gran incultura económica”.

Avizora que “una vez que esta gente llega al poder y esto es bueno que los hondureños también valoren, su objetivo pasa a ser y todo lo que hacen, pasa a ser permanecer en el poder por siempre, por eso buscan cambiar la constitución a objeto de garantizar la reelección indefinida presidencial, por eso buscan cambiar la constitución a objeto de tener el control del Tribunal principal de Justicia o al Tribunal Electoral, a las instituciones, ponerle la mano y el control a todas las instituciones, se pierde el equilibrio de poder y después es muy difícil sacarlos si no imposible, esto lo intentaron en el pasado con mucho éxito personas como Stalin, como Mao Tse Tung o como el señor Hitler (Adolfo) en Alemania o el señor Mussolini (Benito) en Italia y dese cuenta que en realidad no es un problema de derecha y de izquierda sino un problema de vocación autocrática y de apego por el poder y de los privilegios que el poder brinda”.

Cataloga los apuros del mandatario venezolano al decir que “Maduro también tiene además otro problema muy severo y es que él no es Chávez, no tiene el carisma de Chávez, no tiene la fuerza de Chávez, no tiene el discurso de Chávez, no tiene la astucia de Chávez, no tiene las habilidades de Chávez e invariablemente la gente compara lo que era Venezuela en la época de Chávez a lo que es Venezuela en la época de Maduro”.

Por ello expresa que “Maduro sale, como se dice en Venezuela, raspado, es decir que no ha aprobado, las grandes mayorías, incluso las chavistas, están muy disgustadas con el gobierno porque los ha frustrado, les ha deteriorado la calidad de vida, les ha devaluado la moneda, les ha puesto los precios inalcanzables, no les aumenta el salario, ha suspendido en buena medida las políticas asistenciales del gobierno de Chávez porque se quedó sin recursos”.

Concluye señalando que el gobernante venezolano “es un tipo sin suerte, con mala suerte en ese sentido porque todo esto hubiese estallado en manos de Chávez si Chávez no hubiera muerto, todo es consecuencia de la política socialista que impulsó Chávez, esta izquierda trasnochada que todavía piensa en la época de la Unión Soviética como gran solución y no se enteró que el Muro de Berlín se cayó y que la Unión Soviética se derrumbó. Ellos todavía no están enterados de ese aspecto”.


spot_img
spot_img

Más noticias

spot_img
spot_imgspot_img